Los directivos de los bancos españoles cotizados llevan tiempo lanzando mensajes sobre la experiencia de cliente, la transformación digital, las personas, etc. Los inversores y sus accionistas no dejan de observar cómo el precio de los títulos y por consiguiente su capitalización bursátil caen.
En concreto, los ocho bancos cotizados en el parqué madrileño acumulan una pérdida global superior a los 50.000 millones de euros (50.770,42 millones de euros) en su capitalización bursátil. Dado su volumen de acciones en circulación y su porcentaje de caída, BBVA y Santander son las entidades que presentan una disminución mayor en su capitalización, tal y como muestra la tabla.
Todas las entidades presentan un balance negativo en el precio de sus títulos desde enero. De media, los bancos han caído un 21,61% este año. El más castigado, Sabadell (-36,36%); el menos, Liberbank (-4,54%). En el caso de este último, el bajo volumen de negociación y valor de la acción, así como el calentamiento que sufrió tras la confirmación del inicio de conversaciones para una posible fusión con Unicaja, han minimizado el retroceso de su cotización en el Mercado Continuo.
MOTIVOS DEL DESCALABRO DE LOS BANCOS
1.- Política de tipos
Casi todos los analistas consultados por MERCA2 coinciden con los motivos que han llevado a los bancos a querer cerrar 2018 cuanto antes. Lejos queda un comienzo de año prometedor. En primer lugar, la política de tipos del Banco Central Europeo (BCE). “Los tipos de interés al 0% hace que los márgenes de beneficio se reduzcan considerablemente”, apunta Sergio Ávila, Market Analyst de IG. “El mercado descontaba hace tiempo que la baja rentabilidad sobre los fondos propios (Book Value) podría mejorar vía entrada en un escenario progresivo de subida de tipos y están viendo que pasan los meses y sigue sin visualizarse cuando puede ser este momento”, añade César Fernández, director de Instituto Superior de Bolsa, Inversión y Finanzas (ISBIF).
2.- Mercados emergentes y Europa
La situación de algunos países emergentes ha lastrado las inversiones y negocios de los bancos españoles. Sobre todo para Santander y BBVA, con mayor presencia internacional. “Las exposiciones a mercados emergentes como Turquía o México han dejado un aspecto muy deprimente en el sector”, expone Eduardo Bolinches, analista colaborador de ActivTrades. “El desplome de divisas como la lira turca, el peso mexicano o el real brasileño le ha restado potencial a su negocio”, puntualiza Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank.
En el ámbito internacional, también cabe mencionar los problemas internos de Europa. Las dudas en torno al brexit y la crisis de deuda pública que tienen en balance aumentan lastre sobre los bancos para remontar el vuelo. “El trasfondo de esta cuestión italiana deja entrever problemas en la UE y su proyecto conjunto en un momento en el que los Estados Miembro deberían estar más unidos que nunca y remar en una misma dirección”, declara Felipe López-Gálvez.
3.- España
El propio devenir económico de España también pesa. Para empezar, como recuerda Eduardo Bolinches, la banca es “el sector con el mayor peso del selectivo español en un mercado bajista”. Por si fuera poco, el Tribunal Supremo desencadenó en octubre la crisis del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD). Aunque la decisión final (los bancos pagarán el AJD sin retroactividad) fue bien acogida por el mercado, generó una sensación de inseguridad jurídica en la sociedad. “Los comentarios que viene haciendo el nuevo gobierno y su propuesta de introducir un impuesto a las transacciones financieras no ayudan a recuperar la confianza”, puntualiza Felipe López-Gálvez.
PERSPECTIVAS Y APUESTAS PARA 2019
Las perspectivas no son muy halagüeñas para los bancos españoles. ¿Cambiará la situación en 2019? “No hay señales de que vaya a cambiar”, afirma César Fernández. “En la medida que no cambien ninguna de las tres variables (Euribor negativo, el mercado español bajista y la exposición a los países emergentes) podemos decir que nos espera un 2019 de sufrimiento”, apoya la tesis Eduardo Bolinches.
“Me parece complicado que cambie la situación”, apunta Sergio Ávila. “Los tipos seguirán siendo el 0%, al menos hasta finales de 2019; los riesgos de país en Europa seguirán siendo elevados con dificultades en Italia; las posibles elecciones en España y las dudas sobre qué hará la FED en cuanto a los tipos de interés; y el aplanamiento de la curva de tipos no es una buena noticia”, enumera para argumentar su análisis. “La tendencia es bajista por el momento y mientras no veamos mejores noticias para el sectorial y una confirmación en un cambio de tendencia yo estaría fuera del sector”, concluye el analista de IG.
En cuanto a si apostarían por algún valor financiero español en bolsa, los expertos tiran de optimismo más que de análisis. “Técnicamente, no hay ningún banco ahora mismo que esté para entrar; al contrario, estarían todos más para cortos que para largos”, indica Sergio Ávila. Sin embargo, Felipe López-Gálvez considera que “a poco que obtengamos buenas noticias, el sector bancario es uno de los que más potencial de subida tiene”. “Las caídas de este año han dejado al sector con unas valoraciones muy atractivas”, apostilla el analista de Self Bank.
Algunos analistas se mojan. “Usaría el comodín de Renta 4 por aquello de que es banco, pero quizás me atrevería a decir que Bankinter y en menor medida CaixaBank serían lo que mejor podrán aguantar el temporal”, manifiesta Eduardo Bolinches. Por su parte, el director de ISBIF pone sus ojos en otro banco: Sabadell. “Además del elemento macro de tipos de interés, está más deprimido de lo que debería por los graves problemas que sucedieron con la integración tecnológica del banco en Reino Unido que ya está solucionado y debería ir disipándose eso para el inversor”, expone César Fernández. Además, recuerda que “una fusión de Unicaja y Liberbank, si las cifras son como las anunciadas, puede afectarles muy positivamente”.