La bomba Navarro, un mito para la historia

Siro Lopez Endesa Merca2.es

El debate recurrente sobre cuál es el mejor jugador español de baloncesto de la historia tiene poco recorrido. Resulta sencillo poner a todos de acuerdo sobre la figura de Pau Gasol. Ahora bien, quién le acompaña a su diestra en el Olimpo. Aquí se vuelve todo más complejo. ¿El hermano pequeño de Gasol? ¿Los clásicos Epi o Villacampa? ¿La última consagración de Sergio Llull? El abanico es amplio, pero quizá todas las miradas apuntan al mismo hombre: Juan Carlos Navarro.

Aunque en este momento hay otra cuestión prioritaria que zanjar: el futuro de la leyenda del barcelonismo. Tras 20 años en el primer equipo, en estos momentos hay una tensión latente entre jugador y equipo por su continuidad en el club.

Todo empezó al término de la pasada campaña. Tras una temporada bastante floja, tanto del propio Navarro como del equipo en su conjunto, el eterno capitán deslizaba la idea de que había llegado la hora de retirarse. Pero unas semanas después, y en su pleno derecho puesto que tiene contrato en vigor, el internacional español estaría dispuesto a seguir en el club para resarcir todo lo acontecido el año pasado y, de paso, retirarse con una temporada digna.

En este contexto, y al margen de lo que suceda, lo que único claro es que Navarro pasará a la historia del baloncesto español, con mayúscula, con el Barça y, por supuesto, también con la selección española. Sus números y bombas dejan la estela de alguien único en este deporte.

NAVARRO, UN GRANDE

533 partidos en ACB con 907 triples anotados… 341 partidos de EuroLeague, y 623 triples; además de dos máximos entorchados europeos. Uno de ellos, en el año 2003, con uno de los mejores equipos que se recuerde en el baloncesto continental junto a Bodiroga, Fucka, Jasikevicius, Roberto Dueñas…

Además, siempre ha sido capaz de competir con los mejores al máximo nivel. Por ejemplo, en la temporada 2005/06, se fue a los 17,1 puntos de media por partido, en un año que en la liga ACB había miuras de la talla de Lou Roe, Pete Mickeal o Luis Scola.

Y no solo eso, ha sido varias veces líder en anotación de triples; ha alzado títulos nacionales como la liga o la Copa del Rey… harían falta varios artículos para poner en contexto la figura de Juan Carlos Navarro. Además, habría que añadir los logros conseguidos con los “juniors de oro” del basket español como Felipe Reyes, José Manuel Calderón o el propio Pau Gasol.

La cota más alta de excelencia fue la final del EuroBasket de 2011 contra Macedonia:

Pura poesía. Además, hay que recordar su paso por la NBA, donde jugó 82 partidos en la temporada en la que estuvo en Memphis junto a su amigo Pau, y donde coqueteó con el record de triples conseguidos por un novato.

¿UN FUTURO SIN NAVARO?

Que la carrera de un jugador profesional siempre tiene final es algo natural. Se trata de la vida, sin más. Pero cómo sea ese final sí depende de las personas, y con Juan Carlos Navarro se puede cometer un error irreparable.

El gran capitán y canterano del Barça puede hacer lo que quiera, cuando quiera y como quiera. Y más con contrato en vigor. Por lo tanto, si ha dado marcha atrás en sus palabras y quiere hacer otra temporada en la Liga Endesa, su club debería buscar la manera más lógica para darle acomodo en una plantilla que, por cierto, vuelve a jugar dos competiciones de máxima exigencia y este año debería dar la cara en ambas.

Ahora bien, habrá que definir un rol digno para Navarro. Una leyenda con semejante historia a sus espaldas no puede bajar al filial, no tener ficho y solo entrenar; o cualquier tipo de práctica que se hace con los jugadores desterrados. Debe asumir un estatus acorde a su capacidad física en este momento, pero siempre respetuosa.

Además, se trata de la última imagen de la institución tras la marcha de Andrés Iniesta en la sección de fútbol. Es el emblema del barcelonismo, el último gran campeón criado en la cantera. El FC Barcelona se juega mucho con el segundo mejor de todos los tiempos.