El BCE evalúa una nueva herramienta para rescates bancarios

El Banco Central Europeo está evaluando una nueva herramienta que le podría permitir inyectar dinero a los bancos que necesiten un rescate para salvarse de la amenaza de la insolvencia. Esto aborda un vacío en las reglas para el manejo de entidades crediticias con problemas.

La propuesta le permitiría al BCE financiar partes viables de una entidad –el llamado banco bueno– escindido de una institución financiera con problemas, según un documento al que ha tenido acceso Bloomberg y que se basa en una presentación del 21 de marzo al Consejo de Gobierno del BCE. El marco sugerido para el Eurosistema de Liquidez de Resolución establece condiciones que comprenden una amplia garantía de protección contra pérdidas del banco central.

Esta medida puede generar controversia por el simple hecho de que la ley prohíbe que el BCE financie acciones que correspondan a las autoridades públicas, tales como la resolución bancaria. El miembro de la Junta Ejecutiva Yves Mersch advirtió en enero que “la planificación de resoluciones no debe asumir que la liquidez del banco central cubrirá los vacíos”.

La propuesta sugiere que el ERL debería considerarse como una herramienta de política monetaria que asegurase que el sistema bancario pueda transmitir las tasas de interés oficiales a la economía real.

Una nueva fuente de liquidez es algo que se debate desde que la Junta Única de Resolución, el organismo de quiebras bancarias de la zona del euro, manejó su primer gran caso en junio del año pasado y dispuso la venta de la entidad española Banco Popular Español a Banco Santander. Elke König, que está al frente de la SRB, ha dicho que Santander proporcionaba más liquidez que su institución, lo que destaca la necesidad de hallar una solución para cuando el banco bueno no puede encontrar de inmediato un comprador y tiene acceso limitado a fuentes normales de liquidez.

“Hay una serie de posibilidades en el contexto de una resolución en las cuales los bancos centrales del Eurosistema no pueden proporcionar liquidez”, según el documento citado con anterioridad. “Un marco permanente de provisión de liquidez en resoluciones transmitiría una fuerte señal en relación con la unión bancaria y mejoraría la confianza en el funcionamiento del marco de resolución de la zona del euro”.

El financiamiento en el marco del ERL exigiría respaldo público porque las exigencias en relación con la garantía que proporcionan los bancos serían menores que en el caso de las operaciones habituales del BCE. La demanda de garantía hasta podría eliminarse y reemplazarse por la garantía de la zona del euro en “circunstancias excepcionales”, según la propuesta.

La garantía debería tener un “carácter permanente” de modo tal que el BCE pudiera invocarla “Cuando se lo considere necesario”. También debería proporcionársela en el plano europeo en lugar de en el nacional. Si bien la condición apunta a impulsar los intentos de la zona euro de debilitar la interdependencia de los gobiernos y los bancos de sus respectivos países, podría encontrar la oposición de Alemania y otros países que se oponen a la mutualización de la deuda.

Alexander Weber y Alessandro Speciale