La marquesa de Ybarra ‘saca tajada’ del impulso verde con su inversión en Solarpack

Carmen Ybarra Careaga se ha mostrado en los últimos años como una de las inversoras españolas más exitosas. Así, la marquesa de Arriluce de Ybarra, como se le conoce, recoge estos días los beneficios de lo sembrado años atrás. Por un lado, la opa lanzada sobre MásMóvil le permitirá cerrar su inversión con una rentabilidad del 330%, en apenas cuatro años. Mientras, el crecimiento exponencial de su última gran apuesta, por la energética Solarpack, le permite que su inyección inicial se haya multiplicado por dos en poco más de año y medio.

La conocida como marquesa de Ybarra ligó su inversión a la firma energética a finales de 2018, tras la salida a Bolsa de la misma. En aquel entonces, Solarpack contaba con una capacidad total de 252 MW, aunque la mitad eran a través solo de participaciones de capital, contaba con 127 empleados y cerró el año con una facturación de 26 millones de euros. Con el paso del tiempo la compañía ha logrado multiplicar todas esas cifras. Ahora, el número de MW instalados asciende a 545 y la facturación estimada por los analistas para este 2020 se dispara hasta los 175,5 millones.

Además, ese fuerte incremento en sus cifras se ha acelerado en los últimos trimestres. De hecho, los beneficios obtenidos por la compañía entre enero y junio ascendieron a 4,8 millones de euros, lo que supone multiplicar por ocho los obtenidos un año antes. Por si fuera poco, también se ve premiada por trabajar en un sector no solo en clara expansión, sino que además recibirá próximamente una importante inyección económica desde las autoridades europeas. En definitiva, demasiadas buenas noticias que le han permitido a la acción explotar al alza en los últimos meses.

EL CRECIMIENTO DE SOLARPACK DUPLICA LA INVERSIÓN DE LA MARQUESA DE YBARRA

Desde el bache de marzo, Solarpack ha logrado revalorizarse más de un 70% y sobrepasar sus máximos históricos anteriores alcanzados en febrero de 2020. El varapalo del covid-19 supuso una fuerte corrección para el valor que en apenas dos semanas se desplomó cerca de un 37,5%, hasta encontrar suelo en los 10 euros. A pesar de ello, la caída nunca encendió las alarmas en Onchena, la sociedad con la que la marquesa de Ybarra articula sus inversiones bursátiles. Al fin y al cabo, todavía mantenía una rentabilidad cerca al 20% pese al desplome.

Una vez pasado lo peor, el valor se recuperó al calor de las buenas noticias en forma de contrataciones y los buenos datos financieros. De hecho, a mediados de julio los títulos recuperaban sus valores máximos, en el rango de los 16 euros, para posteriormente (una semana después) dar otro estirón para alcanzar una nueva cota máxima histórica en los 17 euros. Una cima que implicaba que la marquesa de Ybarra lograse duplicar su inversión inicial, aunque no duro mucho tiempo. Ahora, el valor se mueve en torno a los 16 euros a la espera de un nuevo impulso al alza, lo que supone valorar su inversión en torno a 33 millones frente a los poco más de 17 millones iniciales.

La fuerte revalorización del valor en Bolsa, y con ello de sus inversores primigenios, tiene también un pequeño asterisco. De hecho, es una de las claves para que la marquesa de Ybarra, entre otros, pueda contar con una rentabilidad tan alta. Y, es que, el valor estipulado con el que debutó en el parqué y al que compraron Onchena y demás fue de tan solo 8,3 euros por título. Una cifra que se situaba en el tramo más bajo previsto en el folleto aprobado por la CNMV, que iba desde los 8 hasta los 10 euros, pese a que el negocio renovable ya era un sector boyante en aquel entonces.

LA FÉ EN MÁSMÓVIL LE RETORNARÁ 400 M€

El último elemento que llamó la atención en aquella salida a Bolsa es que no se pagaron bonus a los directivos por obtener un mayor precio, sino que se limitó a un pago extra por el trabajo realizado. Sin incentivos no hubo una valoración alta y sin ella, los inversores iniciales fueron los que más ganaron. Uno fue la marquesa de Ybarra, pero hubo otros muchos como Banco Santander. Aun así, las ganancias obtenidas por el momento con Solarpack palidecen frente a las obtenidas con su inversión en MásMóvil.

MásMóvil se ha convertido en una historia de éxito que ha hecho muy ricos a aquellos que han creído en ella, una lista que van desde inversores a los propios directivos. La fuerte revalorización bursátil que ha mantenido en los últimos años ha culminado en una opa que valora la compañía en 3.000 millones. Cuatro años antes, la marquesa de Ybarra, a través de Onchena, adquirió una participación de 3,4 millones de acciones por los que desembolsó algo más de 87 millones de euros. Ahora, por esa misma Cinven y KKR han pagado hasta 400 millones, lo que supone multiplicar la inversión por más de cuatro veces. Con dichas ganancias permanecerá en el capital (pagará 110 millones por el 5%) y otra parte sustancial lo destinará a otras inversiones.

Otro de sus últimos aciertos fue con en Europac. De nuevo a través de Onchenta, Ybarra decidió aumentar con fuerza su presencia en la compañía en marzo de 2016, a un valor de 2,5 euros por título. Al poco después, y tras una opa lanzada por DS Smith, las acciones se dispararon hasta los 16,8 euros dejando en las arcas de la marquesa una más que jugosas plusvalías. Con los resultados en la mano, los inversores no deberían perder de vista sus próximas inversiones en otras compañías.

Pedro Ruiz
Pedro Ruiz
Colaborador de MERCA2