¡La deliciosa fabada asturiana! En estos días muchos sueñan con ella. Cuando hace frío, el cuerpo lo que nos pide es una comida deliciosa y caliente, llena de sabor. Eso es lo que hace la fabada asturiana por nosotros, porque se trata de una reparación bastante deliciosa y reconfortante a cada bocado, y esa es una de las principales razones por las cuales resulta tan apreciada y tan demandada no solo en lo que corresponde a gastronomía española, sino en el resto del planeta, porque ha logrado conquistar a propios y a extraños con sus ingredientes especiales y su sabor único.
Como no podía ser menos, hoy te mostraremos cómo se hace una increíble fabada asturiana siguiendo los pasos tradicionales y escogiendo los mejores productos para lograr un resultado excepcional. Asimismo, te proporcionaremos ciertas sugerencias y secretos para lograr un resultado impecable. ¡Empecemos ya! Historia de la deliciosa fabada astur
Orígenes de la fabada asturiana

El origen de este platillo de legumbres viene desde las tierras de Asturias, hacia el extremo del norte de la península ibérica, donde el frío aprieta verdaderamente. Esta preparación bastante reconfortante, es ideal para combatir los helados meses de invierno de esa región, y ya es su plato insignia hasta para las ocasiones especiales.
Las fabes asturianas son la estrella de este plato, unas legumbres grandes y suaves, combinadas con el compango, que incluye una variedad de carnes curadas para darle un sabor rico y delicioso. Aunque no se sabe con certeza de dónde proviene, se cree que la fabada asturiana se volvió famosa en el siglo XIX. En la actualidad, este plato representa la esencia de la cocina española y se disfruta en numerosos hogares y locales gastronómicos en diferentes países.
Ingredientes esenciales para una fabada auténtica

Para preparar una fabada asturiana para 6 personas, necesitarás:
Ingredientes principales:
- 500 g de faba asturiana (peso en seco) en remojo desde el día anterior o 1 kg de faba fresca (que no necesita remojo)
- 200 g de chorizo asturiano
- 200 g de morcilla asturiana
- 200 g de lacón curado en remojo desde el día anterior
- 200 g de panceta curada o tocino en remojo desde el día anterior
- 1 cebolla mediana (opcional, pero aporta dulzor y suavidad al guiso)
- 1 pellizco de hebras de azafrán (opcional, pero le da un toque especial)
- 1 o 2 hojas de laurel (opcional, para aromatizar)
- 1 ramillete de perejil (opcional)
- 1 cucharadita de pimentón dulce (opcional)
- 2 o 3 dientes de ajo (opcional)
- 1 chorrito de aceite de oliva
- Sal al gusto
Tiempo de preparación:
- Tiempo de preparación: 5 minutos
- Tiempo de cocinado: 2 horas y 30 minutos
- Tiempo total: 3 horas
- Dificultad: Fácil
Vamos con el proceso de preparación de la fabada asturiana

Estos son los pasos que se deben seguir para poder hacer una fabada asturiana como Dios manda:
El remojo de las fabes asturianas resulta esencial

Remoja las fabes secas en agua fría por un mínimo de 12 horas para asegurar que estén tiernas antes de cocinarlas. Si optamos por utilizar habichuelas recién cosechadas, podemos ahorrarnos esta etapa. Proceso de cocción
En una cacerola grande, ponemos las fabes remojadas y las cubrimos con suficiente agua fría hasta que estén sumergidas. Las cocinamos a fuego medio-alto y esperamos a que empiecen a hervir. Mientras realizamos este paso, es bastante usual que se forme una capa blanca burbujeante a nivel superior de la cacerola; lo que tenemos que hacer es eliminarla con una espumadera, para quitar toda suciedad que pueda haber quedado junto con la espuma de la cocción.
La incorporación de los condimentos

Agregamos a la cazuela el chorizo, el embutido, el jamón y el tocino curado. Es importante remojar todos estos elementos previamente, a excepción del embutido y el chorizo, porque con ello estaremos eliminando el exceso de sal
Dar sabor a la fabada

Añadimos una cebolla sin pelar, azafrán, laurel, perejil, pimentón suave y los ajos sin pelar, esto último si así se quiere. Luego agregamos también un chorro de aceite de oliva y se vuelve a poner todo al fuego.
La cocción ahora es a fuego suave

Luego de que esta mezcla esté caliente, volvemos a eliminar la espuma que pueda haber aparecido por segunda vez. Ahora, lo que hay que hacer es reducir el ruego y cubrir la cacerola, dejándola a fuego lento por un período muy largo, cerca de hora y media, o hasta que las fabes se hayan ablandado.
Es recomendable echarle a la preparación un vaso de agua fría cada cuarenta y cinco minutos, para “asustar a las fabes”, lo que no solo evita que se rompan, sino que ayuda a que se pongan suaves sin que se deshagan.
Probar y hacer la última corrección de sal antes de servir

Cuando las fabes ya estén suaves, hay que probar la preparación para rectificar el punto de sal, luego hay que dejar que la cocción repose por lo menos quince minutos antes de servirla. Luego se procede a cortar las carnes en pedazos y se decide si toda la preparación se va a servir junta o si se hará un servicio separado.
Opiniones de expertos para una fabada de diez

- Escoge fabes asturianas de la mejor calidad. La consistencia cremosa de estas legumbres es esencial para que el plato resulte delicioso.
- Evita agitar o revolver con utensilios de cocina, porque no es necesario. Para impedir la rotura de las fabes, agita la cacerola delicadamente.
- Hay que estar pendientes de cuánto dura la cocción. La cocción a una a temperatura baja es lo que garantiza un gusto fuerte y la consistencia a la que estamos acostumbrados en una fabada asturiana.
- Escaldar las legumbres incrementa la oportunidad de que se mantengan completas. Arrojar agua fría de vez en cuando evita que pierdan su consistencia.
- Dejar reposar la preparación. Tal como ocurre con muchas preparaciones de casa, la fabada asturiana mejora con el tiempo, así que resulta más suculenta si se come un día después de haberse hecho.
¿Con qué podemos acompañar a una buena fabada asturiana?

Un plato de fabada asturiana es lo suficientemente suculento como para no necesitar mucho más de modo que no es necesario que pienses en acompañamiento, a menos que se trata de:
- Tostadas de pan de campo: excelente pan muy crujiente y perfecto, porque podrás remojarlo en la rica salsa de la fabada asturiana.
- Bebida tradicional asturiana: cómo no podía ser de otra manera, acompañar la fabada asturiana con una bebida agria tradicional de la misma región ya es una costumbre. Además, ayuda a contrarrestar los efectos de la pesadez de un platillo tan calórico.
- Ensalada: acompañar la fabada asturiana de una ensalada básica de lechuga, tomate y cebolla podría ser el toque fresco que le haga falta a esta preparación.
Muchos anhelan el invierno tan solo por poder probar la fabada asturiana

La deliciosa fabada asturiana evoca los sabores y las costumbres, lo que trasciende al hecho de que se trate de una preparación culinaria de legumbres. No es una simple receta y con un poquito de cariño y de atención a la cocina, todos los miembros de la familia o tus amigos disfrutarán de esta deliciosa receta estilo casero, pero digna de un restaurante
Si llevas al pie de la letra las instrucciones de manera cuidadosa, verás que los resultados te van a sorprender, con un plato que es suculento y exquisito, ideal para la temporada de invierno, así que ahora ¡manos a la obra! Motívate a preparar esta delicia asturiana y agrégalo a tu recetario de la gran cocina española.