¿Quieres una receta sencilla y deliciosa para impresionar a todos en casa? Las tortitas de fideos y queso con huevo son ideales y seguro que nunca se te habría ocurrido utilizar fideos para preparar algo así. Se trata de una de esas recetas maravillosas de aprovechamiento que además de evitar que desperdiciemos comida, nos permite reciclar los ingredientes de los platos que han sobrado para elaborar algo totalmente nuevo, original y muy delicioso. Aprovecha los fideos sobrantes y conviértelos en un plato sabroso y nutritivo. ¡Además, los niños las adoran, así que son perfectas para una cena rápida y fácil! A continuación te dejamos el paso a paso y te animamos a que pruebes esta receta.
INGREDIENTES

Estos son los ingredientes que necesitas para hacer unas tortillas de fideos.
- 200 g de fideos cocidos (pueden ser sobrantes de otra comida)
- 2 huevos
- 100 g de queso rallado (el tipo que más te guste, gouda, mozzarella, cheddar, etc.)
- 1/2 cebolla picada (opcional)
- 1 diente de ajo picado (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
- Aceite de oliva para freír
MODO DE PREPARACIÓN

En un recipiente grande, mezcla los fideos cocidos y el queso rallado. Si decides añadir ajo y cebolla picados, este es el momento de incorporarlos. La idea es que todos los ingredientes se distribuyan de manera uniforme para que cada tortita tenga un sabor equilibrado. Una vez que los fideos y el queso estén bien mezclados, agrega los dos huevos. Mezcla todo nuevamente hasta que los huevos estén completamente integrados. Este paso ayuda a unir la mezcla y a que las tortitas tengan una textura firme al cocinarse.
DARLE FORMA A LAS TORTITAS

Con las manos limpias o con la ayuda de una cuchara, toma porciones de la mezcla y forma bolas. Luego, aplástalas suavemente para darles forma de tortita. Asegúrate de que tengan un grosor uniforme para que se cocinen de manera uniforme.
En una sartén grande, calienta una buena cantidad de aceite de oliva a fuego medio. Cuando el aceite esté caliente, coloca las tortitas en la sartén. Es importante no sobrecargar la sartén para que las tortitas se cocinen de manera uniforme y queden crujientes por fuera.
LA FRITURA PERFECTA

Fríe las tortitas durante unos 3-4 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes. Utiliza una espátula para voltearlas con cuidado y asegurarte de que se cocinen de manera pareja por ambos lados.
Si prefieres una opción más saludable, puedes utilizar una freidora de aire. Rocía las tortitas con un poco de aceite de oliva y cocínalas a una temperatura de 180ºC durante 10-15 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes. También puedes hornearlas en lugar de freírlas. Precalienta el horno, coloca las tortitas en una bandeja para hornear y hornéalas hasta que estén doradas y crujientes. Tendrás que voltearlas a mitad de cocción para que se cocinen de manera uniforme por ambos lados.
UNA RECETA VERSÁTIL QUE PERMITE VARIANTES

Prueba diferentes tipos de queso, como mozzarella, cheddar, gouda, o cualquier otro que te guste. Cada uno aportará un sabor único a tus tortitas. También puedes experimentar mezclando varios tipos de queso para obtener una combinación aún más interesante.
Para hacer tus tortitas más nutritivas y sabrosas, puedes incorporar pequeñas cantidades de verduras finamente picadas. Los pimientos, zanahorias y espinacas son excelentes opciones. Asegúrate de picarlas lo suficientemente pequeñas para que se mezclen bien con la masa de las tortitas.
PRUÉBALAS CON SALSAS

Acompaña tus tortitas con una salsa que complemente su sabor. Puedes optar por una salsa de tomate casera, salsa de yogur con hierbas frescas, o una mayonesa de ajo. La salsa añade humedad y un toque extra de sabor a las tortitas.
No te limites a usar solo fideos de pasta en la receta. Puedes utilizar cualquier tipo de pasta que tengas a mano, como espaguetis, fideos de arroz o incluso fideos de soba. Esto te permite experimentar con diferentes texturas y sabores en tus tortitas.
SE PUEDEN CONSERVAR UN DÍA O DOS

Si te sobran tortitas, guárdalas en un recipiente hermético en el refrigerador. Cuando quieras recalentarlas, puedes hacerlo en una freidora de aire o en una sartén caliente para que conserven su textura crujiente. Esta receta está inspirada en la frittata italiana, que es una especie de tortilla hecha con espaguetis. Es otro de esos platos perfectos para no tirar nada y comer las sobras pero haciendo un menú diferente para no aburrirse comiendo dos días lo mismo. Así pues, si quieres, en vez de hacer tortitas, puedes animarte y cocinarlo todo en una sartén grande como si fueses a preparar una tortilla de patatas. También puedes hacer las tortillas con las sobras del arroz o la paella. Son igualmente deliciosas.
COME PASTA SIN MIEDO

La pasta es un alimento versátil y nutritivo, ampliamente consumido en diversas culturas. Compuesta principalmente de harina de trigo, agua y, en algunos casos, huevo, la pasta es una buena fuente de carbohidratos complejos, esenciales para proporcionar energía sostenida. Además, contiene proteínas vegetales y pequeñas cantidades de grasa, lo que contribuye a una dieta equilibrada. La pasta también aporta vitaminas del grupo B, necesarias para el metabolismo energético, y minerales como hierro y magnesio.
Uno de los mitos más comunes es que la pasta engorda, pero esto depende de la cantidad consumida y los acompañamientos. Una porción moderada de pasta, especialmente si es integral, puede formar parte de una dieta equilibrada sin contribuir al aumento de peso. La pasta integral, en particular, ofrece beneficios adicionales al ser rica en fibra, lo que ayuda a la digestión y proporciona una sensación de saciedad más prolongada.
En cuanto a las calorías, una porción de 100 gramos de pasta cocida aporta aproximadamente 150 calorías. Es recomendable consumir pasta de forma moderada, alrededor de dos a tres veces por semana, acompañada de verduras, proteínas magras y grasas saludables. De esta manera, se puede disfrutar de sus beneficios sin caer en excesos que puedan afectar el peso y la salud en general.