Movistar, Vodafone y Orange ponen los cuernos al 5G con el fútbol

‘El desafío digital: el momento de España’. Esa era la mesa de debate para los grandes operadores de telefonía en el Digitales Summit 2018, el evento sectorial que organiza la nueva patronal de las empresas de telecomunicaciones. Pero hubo poco desafío. Movistar, Vodafone y Orange han aprovechado la presentación ante el gran público de su nueva organización para hablar de fútbol y llorar por la regulación. Nada de 5G o planes de fibra.

Durante más de 30 años los operadores de telecos, junto a las grandes empresas tecnológicas, se reunían en Santander durante el mes de septiembre para abordar la situación del sector en un encuentro que se convirtió en referencia. Ahora, tras la escisión de las empresas de telecomunicaciones de la patronal Ametic, tanto operadores como proveedores y consultores tienen su propia asociación: DigitalES. Y también tienen su propio evento.

Así, durante estos días debaten en Madrid sobre el futuro digital de la economía española. Aunque como pasaba en Santander, el plato fuerte llegó cuando los responsables de los operadores de telefonía subieron al escenario. Euskaltel, Telefónica, Vodafone y Orange (el CEO de MásMóvil se ausentó por su reciente paternidad) debían debatir sobre el desafío digital en España. Pero el único desafío consistía encontrar en sus palabras algo relacionado con su (hasta ahora verdadero) negocio.

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El Scatergories es suyo y, por lo tanto, hablan de lo que quieren en su evento. El primero en romper el fuego fue el presidente de Telefónica España, Emilio Gayo. “Mismos servicios, mismas reglas”. Es el mantra de las telecos para mostrar su enfado con Netflix, Facebook y compañía. Opinan que si los operadores de telefonía están sobrerregulados, también lo deberían estar quienes en estos momentos comparten nicho de negocio por ejemplo en los contenidos audiovisuales.

Recogió el guante el CEO de Orange España, Laurent Paillassot. “Se deben modernizar las normas”. Y como fin de fiesta, el responsable del operador azul: “También hay que revisar la fiscalidad”. Mensajes que compartía asintiendo con la cabeza el consejero delegado de Vodafone España, Antonio Coimbra.

Rejonazos a los OTTs (compañías que hacen su negocio sobre la red), llantos por todos los impuestos que pagan, algunos más justificados que otros, como es el caso de la abusiva tasa para financiar la televisión pública; y en definitiva unos discursos acoplados a las legítimas reivindicaciones dentro de su patronal. Pero faltaba la guinda a la fiesta.

MOVISTAR, VODAFONE Y ORANGE… Y EL FÚTBOL

La mesa redonda continuaba sin que hubiera tiempo para hablar sobre los últimos coletazos a los despliegues de fibra o, algo que ya tenemos encima, el segundo dividendo digital, la necesidad de reantenizar los hogares y el 5G. Nada de nada.

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El tema estrella de estas semanas, los derechos del fútbol, surgió para animar a los asistentes. El todos contra todos quedaba inaugurado. Vodafone aseguraba, mirando de reojo al presidente de Telefónica España, que “las telecos seguirán pagando la fiesta del fútbol”. La alusión se debe a que Movistar tiene ahora mismo todos los derechos en exclusiva, porque los ha comprado a LaLiga y Mediapro, y por lo tanto eso pone en jaque a naranjas y rojos.

Por su parte, la filial francesa, a través de su CEO, anunciaba que ellos tendrán el fútbol. Más presión para el consejero delegado de Vodafone, que tuvo que sacar a relucir que ni todos quieren tanta pelota, y, ni muchos menos, a todos les gusta pagar. Pan y circo. Además, para no rebajar la tensión del ambiente, Antonio Coimbra se pegaba un pisuergazo y, aprovechando que había mucho directivo de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en la sala, instó a vigilar lo que hacía Movistar con el fútbol y las facturas de los clientes por si estos pagaban de más para hacer frente al elevado coste que ha tenido para los azules hacerse con los derechos.

SIN PISAR CHARCOS

Risas, alguna que otra broma y paso al nuevo secretario de Estado de Agenda Digital, Francisco Polo. Curiosamente, éste tampoco ha entrado en temas de interés general. Porque los operadores se saludaron, se citaron para tomar un café y ponerse precio al fútbol, aquel que por enero no iban a comprar, y una sola palabra sobre el 5G y el dividendo digital.

Por eso, tampoco se puede echar nada en cara al nuevo secretario de Estado, recién llegado al cargo, que no aclare la hoja de ruta sobre cómo será el impacto económico de la subasta de frecuencias para acondicionar el 5G, qué sucederá con las televisiones, etc. Movistar, Vodafone y Orange han vuelto a escenificar que esta nueva tecnología de movilidad, que traerá mayor velocidad y mejor conectividad, no supondrá ningún impacto adicional en su cuenta de resultados pese a la inversión que tendrán que llevar a cabo para adaptar las redes.

Básicamente se trata de romper expectativas (las que ellos crearon) por si la llegada comercial del 5G tiene que retrasarse. En realidad las frecuencias deben quedar asignadas, bajo mandato europeo, antes de que termine 2020. Luego, la implantación comercial dependerá de cada operador. El problema es que a día de hoy no saben cómo será la monetización. Es decir, aparte de mejorar las redes para que los usuarios de Netflix, Facebook o HBO tengan mejor experiencia en el móvil, no saben muy bien qué les otorga como elemento diferencial la llegada del 5G.

Y en ese contexto fue como Movistar, Vodafone y Orange acamparon en los cerros de Úbeda en su primer evento con DigitalES. Espera fútbol hasta septiembre… y más allá.

Raúl Masa
Raúl Masa
Ex Coordinador de redacción y redactor de empresas y economía; especializado en telecomunicaciones, tecnología y energía.