Madrid Central arranca con muchas dudas y sin consenso

Este viernes entra en vigor Madrid Central. Desde las 00.00 horas de la madrugada el Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático comienza la fase uno. De momento solo será de manera informativa y no habrá sanciones.

Ha llegado el día, pero, a pesar de que el ayuntamiento ha intentado explicarse, todo son dudas. Los plazos, las fechas, las sanciones, las pegatinas. Todo lo que huele a Madrid Central parece atrapado en un limbo incomprensible. Las fechas no están claras: a partir de este viernes comienza la fase informativa, será un proceso de transición hasta la puesta en marcha del sistema de control automático en enero.

Habrá un periodo de dos meses de notificaciones de infracción sin multa. Las normas de acceso limitarán la circulación dependiendo de la función del vehículo, teniendo en cuenta las características de cada coche, según los distintivos ambientales. De momento no es obligatorio que los coches lleven el distintivo, empezará a serlo el 24 de abril. ¿Qué ocurrirá el mes de abril hasta que llegue le fecha límite? Es una incógnita.

A partir de este viernes solo podrán circular por la zona de bajas emisiones los residentes en la zona, los coches cero emisiones, las personas con movilidad reducida, los vehículos comerciales de carga y descarga y los servicios profesionales. Además, habrá excepciones: vehículos de empresas y profesionales de servicios y suministros, los titulares de plazas de garaje particulares y plaza de aparcamiento municipal para residentes, taxi y VTC, previamente contratado, vehículos de asistencia sanitaria y bicicletas. Las motos podrán circular y aparcar sin restricciones con las pegatinas B y C, desde las 7:00 de la mañana hasta las 22:00 horas. Fuera de este horario podrán acceder siempre y cuando vayan a un aparcamiento.

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En el ayuntamiento son optimistas. La responsable de movilidad del consistorio madrileño, Inés Sabanés, ha apelado a la buena disposición de la ciudadanía, y ha señalado que “no habrá controles de acceso con un policía”. Los conductores tendrán que seguir las señales. Habrá 600.000 folletos, autobuses informativos y mucha información en la calle, además de controles de acceso “de carácter comunicativo”.

Respecto a las declaraciones de varios policías que apuntaron que no hay un plan especial para regular Madrid Central, la concejala ha señalado que “no es real”. Sabanés asegura que hay un operativo especial y que además se junta con el operativo especial de navidad. «Hay agentes de movilidad muy capaces”. Los controles de acceso, matiza, están destinados a la fluidez del tráfico, y de momento serán meramente pedagógicos. “Se creía que con el protocolo anti comunicación iba a haber un caos circulatorio y al final los conductores seguirán las normas por sí mismos”, apuntó Sabanés.

Como alternativa al coche el ayuntamiento señala que el ciudadano dispone de 70 líneas de autobuses en el centro, seis líneas de metro, nueve de cercanías, 27 paradas de taxi, 59 estacionamientos de bicicletas y más de 4.000 plazas de aparcamiento.

Para aparcar en el centro, si el usuario no es residente empadronado, tendrá que hacerlo en un parking público o privado, solo para coches con la etiqueta ambiental de la DGT. En los públicos se instalarán paneles indicativos, para que el conductor sepa si hay plazas libres. Si una persona va de visita necesitará un permiso especial, que el residente deberá solicitar en el ayuntamiento. Cada vecino dispone de 20 invitaciones al mes. El ayuntamiento se compromete a actualizar la lista de invitados a diario, para evitar cualquier problema en forma de sanciones.

AHORA MADRID SE QUEDA SOLO

Ahora Madrid se ha quedado solo. El resto de partidos se han mostrado contrarios a la nueva normativa. El Partido Popular presentó un recurso contencioso-administrativo contra Madrid Central, ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Según los populares, esta norma carece de los trámites e informes previos obligatorios. Ciudadanos exigió la paralización de proyecto. Y el PSOE, que en un primer momento fue aliado del equipo de Carmena, ahora pide al consistorio que retrase la aplicación de la norma hasta que haya consensos. Anteriormente, el PSM había criticado que se retrasase la entrada en vigor de la norma una semana, ya que, en un primer momento iba a arrancar el pasado viernes, 23 de noviembre.

Casi hasta el último momento el ayuntamiento ha estado en vilo con la ejecución de Madrid Central. La asociación de autonomistas europeos (AEA) recurrió el pasado miércoles ante el TSJM el área de bajas emisiones, solicitando la paralización cautelar y urgente de la medida. El Tribunal decidió no paralizar la ejecución de la norma, tan solo diez horas antes de que entrara en vigor.

EMPRESARIOS, COMERCIANTES Y REPARTIDORES EN PIE DE GUERRA

La norma tampoco ha sido bien recibida por parte de los empresarios y comerciantes de la zona. Creen que las restricciones de tráfico afectarán a las ventas, y más aun tratándose de esta época del año.

Las 59 asociaciones que conforman la Plataforma de Afectados por Madrid Central, iniciaron varias acciones para reivindicar el cambio de la norma. Aseguran que la medida se ha adoptado sin ser consensuada y con demasiada rapidez y han tratado de convencer al equipo de gobierno de que es perjudicial para sus intereses, no obstante, apuntan que cuando se cierra el centro las ventas bajan en torno a un 17%.

La zona de bajas emisiones engloba casi todo el distrito Centro, los barrios de Embajadores, Cortes, Justicia, Universidad y por supuesto Sol, a los que se integrarán las cuatro áreas de prioridad residencial: el barrio de las Letras, Cortes, Embajadores y Ópera.