La IA o inteligencia artificial cada vez es más inteligente y puede realizar más cosas. Algunas de ellas quizás ni te las imaginas. Pero los desarrolladores intenta que puedan imitar a las personas con el objetivo de que ayuden a realizar múltiples tareas en el futuro y liberar de este trabajo a las personas. E incluso que se puedan usar para mejorar algunos servicios que ahora mantienen personas.
Han desarrollado inteligencia artificial capaz de realizar recetas de cocina inventadas por ella misma, también para probar nuevos fármacos y encontrar curas para multitud de enfermedades, e incluso capaces de crear y escuchar música. Puede que pronto puedas comer en un restaurante con menús desarrollados por IA, e incluso disfrutar de piezas musicales en las que no ha intervenido ningún compositor…
Así funciona el algoritmo de inteligencia artificial para crear y escuchar música
¿Qué es una IA?
La IA o inteligencia artificial es un tipo de inteligencia no natural, es decir, que no procede de ningún ser vivo. Es una inteligencia creada por computación, ya sea a través de una serie de algoritmos de software o implementada por hardware.
Se consigue a través de algoritmos que dotan a la máquina de una capacidad cognitiva asociados a las mentes humanas, como la capacidad de percibir, razonar, aprender, resolver problemas, tomar decisiones, etc.
Esta inteligencia artificial cada vez encuentra más campos de aplicación, y poco a poco van sustituyendo al personal humano. Por un lado, ahorran gran cantidad de dinero, realizan las tareas sin cansarse y a unas velocidades muy superiores a los que podría hacerlo una persona, e incluso, en muchos casos consiguen mejores resultados.
Por ejemplo, con el coronavirus y otras amenazas, la inteligencia artificial puede ayudar a probar y desarrollar nuevos medicamentos y vacunas. Probando diferentes combinaciones de forma mucho más rápida a como lo haría un ser humano, acelerando así el proceso de buscar una cura.
Evidentemente, en algunos casos aún les queda mucho por hacer, ya que no funcionan igual de bien que las personas e incluso pueden dar lugar a errores.
