Iberdrola aspira a ser un actor protagonista en el mercado francés y ha lanzado una ofensiva en comercialización eléctrica con el objetivo de alcanzar una cuota del 10% del mercado residencial en el país galo. El mercado residencial eléctrico francés supera los 32 millones de clientes, siendo EDF el principal rival, con una cuota de en torno al 80%, y contando con otros actores relevantes como Engie, que supera los 3,5 millones de clientes, o Total.
Como primer paso para ello, la energética, que ya cuenta con 100.000 clientes en Francia, aspira a alcanzar un millón de clientes particulares en el país en 2023 con energía 100% renovable. Para ello, Iberdrola ha lanzado en el mercado galo una oferta de electricidad hasta un 10% más barata que la tarifa de consumo regulado (impuestos no incluidos), informó la compañía.
El director general de Iberdrola en Francia, Reginald Thiebaut, destacó que, a día de hoy, el grupo está convencido de que sus clientes «no solo buscan una oferta verde competitiva, sino también la seguridad de elegir a una empresa que esté realmente comprometida con la transición energética«.
SEGMENTO DE ‘PPAS’ CON EMPRESAS.
La compañía quiere liderar el segmento de contratos de compraventa de energía (PPA, por sus siglas en inglés) para ayudar a las empresas en su proceso de descarbonización.
A este respecto, Iberdrola ha impulsado en los últimos años contratos de compraventa de energía con numerosas multinacionales de Estados Unidos, México o España, suministrando energía procedente de instalaciones eólicas y fotovoltaicas. Thiebaut se mostró convencido de que este modelo de ‘PPAs’ ya consolidado en Estados Unidos «supondrá un cambio de modelo estructural en Europa».
En Francia, Iberdrola está desarrollando, a través del consorcio Ailes Marines, participado en un 70% por la energética y en 30% por Avel Vor, el proyecto Saint Brieuc, cuya puesta en servicio está prevista para 2023 y que representa una inversión de 2.200 millones de euros. Con una capacidad instalada de 496 megavatios (MW), se espera que esta instalación cubra la demanda energética de 835.000 personas y aumente así la penetración de las energías renovables en el ‘mix’ energético francés.
OFENSIVA COMERCIAL EN PAÍSES DEL VIEJO CONTINENTE.
Este asalto al mercado francés se enmarca dentro de la estrategia del grupo para intensificar su ofensiva comercial para crecer en el negocio minorista en otros países del Viejo Continente como Italia o Portugal, donde ya cuenta con unos planes y una presencia destacada, e Irlanda, que no se encontraban entre sus mercados principales.
En Portugal, la empresa se ha convertido en el segundo suministrador de electricidad y ha doblado su base de clientes, superando los 350.000. La energética pretende superar los 500.000 contratos a finales de 2020. En Italia, terreno de Enel, el grupo español ha ganado más de 100.000 clientes de electricidad y gas en sus 12 primeros meses, con el objetivo de superar el medio millón de clientes en 2020.
En Irlanda, donde contaba con presencia en el mercado de generación renovable desde hace más de 20 años, el grupo desembarcó el pasado mes de junio en el negocio minorista eléctrico con una ofertas de tarifas eléctricas 100% renovables para los consumidores, así como de gas y productos de doble combustión.
