Alianzas, previsión de apertura de rutas, empleos, planes de negocio… Todo queda en el aire con el acuerdo de IAG con Globalia para la compra de Air Europa por 1.000 millones de euros. Una operación que, en caso de efectuarse, supondrá una verdadera hecatombe para el negocio turístico de Globalia y cuestiona la necesidad de perder su mayor activo a las puertas de entrar en el negocio del transporte ferroviario.
En 2018, la división aérea de Globalia con Air Europa (junto con Air Europa Express) aportó el 52% de los ingresos totales del grupo. Es su negocio más rentable con unos ingresos de 2.114,52 millones de euros en 2018, un 9,3% más en comparación con el año anterior. Es decir, más de la mitad de los ingresos llegan a través de Air Europa.
Sus planes de negocio, intactos según fuentes de la aerolínea hasta que se apruebe la venta, invitan a pensar en el gran potencial de la aerolínea de Juan José Hidalgo, especialmente en Latinoamérica. En esta región, la compañía no ha dejado de abrir rutas. Asimismo, firmó un importante acuerdo con Air France para una sociedad conjunta para sus operaciones en la zona y, además, está estudiando la creación de una nueva marca para operar vuelos domésticos en Brasil tras ser la primera compañía extranjera en conseguir la licencia.
La siguiente división en importancia es la minorista. Viajes Halcón, Viajes Ecuador y Globalia Corporate facturaron 980 millones de euros el pasado años, un 16% menos que el año anterior. Estos datos son los peores de los últimos cinco años. Quizás por ello el grupo ha tratado de reflotar su división buscando ingresos a través de la venta de servicios de telecomunicaciones de O2 tras un acuerdo con Telefónica. También selló alianza con la comercializadora Aldro Energía para comercializar en las tiendas de Halcón y Ecuador sus paquetes de suministro de electricidad y de gas natural, tal y como adelantó ‘El Independiente’.
Peligra el paquete turístico que incluye vuelo con Air Europa y hotel con Be Live vendido a través de Halcón Viajes
Tras esta, la división mayorista con Travelplan a la cabeza aportó el 9% de los ingresos, la hotelera (Be Live) el 5% y Globalia Handling el 4%. Esta última –junto con la división de mantenimiento aéreo– corren el riesgo de salir del grupo con la venta de Air Europa. También existe una división de transporte por carretera con autocares, cuya participación en los ingresos del grupo es insignificante.
En este contexto, la salida de Air Europa hace peligrar la facturación e ingresos del resto de filiales, pues el plan de negocio del grupo turístico contempla abrir un hotel en cada destino al que vuele Air Europa. Motivo por el cual el paquete turístico que incluye vuelo con Air Europa y hotel con Be Live vendido a través de Halcón Viajes parece tener los días contados.
Por tanto, si Competencia da luz verde a esta alianza, todas las divisiones de Globalia se verán afectadas de forma negativa. Cabe recordar que el grupo cerró 2018 con un beneficio neto de 48,7 millones de euros. Por otro lado, la compañía logró una facturación consolidada de 3.850 millones de euros, lo que supone un 4,3% más que el año anterior, la mayor cifra desde 2014.
¿EL TREN SUSTITUYE AL AVIÓN?
De momento, Air Europa mantendrá su operativa hasta que la operación de compra se complete en el segundo semestre de 2020. Pero mientras tanto, Globalia está inmersa en otra operación: la liberalización del tren fijada para el 1 de diciembre de 2020.
El grupo turístico se ha aliado con Talgo (junto con el socio financiador Trilantic Europe) para entrar a prestar servicio de transporte de viajeros en tren AVE en competencia con Renfe. Fuentes de Globalia aseguran que ambos procesos han transcurrido de forma independiente y que “su participación en el consorcio es pequeña”. Por lo que se prevé improbable que pueda llenar el hueco que dejaría la división aérea.
Así, la alianza se conoció tras finalizar el plazo de Adif para presentarse oficialmente a alguno de los tres lotes en los que se divide la oferta del nuevo AVE privado en España. Competirán frente a la francesa SNCF y el consorcio de Ilsa (firma propiedad de los dueños de Air Nostrum) y Trenitalia, la empresa pública ferroviaria italiana. El grupo de concesiones Globalvía y el conglomerado Eco Rail también han pedido capacidad. Su solicitud se conoció más tarde por un retraso en la recepción informática, según Europa Press.
En este proceso tampoco está nada cerrado. Hasta el 15 de diciembre no se conocerá el nombre de las empresas o consorcios que competirán con Renfe y optarán por alguno de los tres lotes que diseñó Adif.
