George Soros defiende los bonos perpetuos como «salvación» de la UE

El magnate financiero estadounidense de origen húngaro George Soros ha defendido este viernes la opción de emitir bonos perpetuos o ‘consols’, como se conoce a estos instrumentos en los países anglosajones, como la mejor fórmula para hacer frente al impacto económico de la pandemia de Covid-19 y a la reconstrucción del Viejo Continente, afirmando que «podrían ser la salvación de la UE».

«Por desgracia, mi sugerencia de los bonos perpetuos se ha confundido con los ‘coronabonos’, y esto ha enrarecido el debate», señala Soros en un cuestionario compartido con la prensa, donde explica que «ambas cosas son totalmente diferentes entre sí». «Los ‘coronabonos’ se han rechazado decisivamente, y con razón, puesto que requieren de un grado de mutualización simplemente inaceptable», afirma.

En este sentido, el veterano inversor, que con su ataque especulativo logró en 1992 sacar a la libra esterlina del sistema de cambio europeo en el denominado ‘miércoles negro’, subraya que mediante los ‘consols’ la única obligación mutua es el pago del interés anual, «que es insignificante» y permitiría levantar urgentemente un billón de euros con el pago de 5.000 millones de euros anuales en intereses.

«¡Esto representa una bajísima relación coste/beneficio!»,plantea Soros, para quien esste grado de mutualización debería ser «fácilmente aceptado» por los Estados miembros, ya fuese por unanimidad o por una una coalición mayoritaria de países a favor.

De este modo, destaca que los bonos perpetuos no tendrían que venderse de una sola vez; podrían emitirse en tramos, y serían comprados por inversores a largo plazo, como aseguradoras que buscasen bonos a largo plazo para equilibrar sus pasivos, mientras que, a medida que los mercados se fuesen familiarizando con estos nuevos instrumentos, atraerían a más compradores y sus precios obtendrían un beneficio extra.

«Este es un excelente momento para emitir bonos a largo plazo», subraya el financiero, recordando que Alemania consiguió recientemente vender un bono a 30 años con un tipo de interés negativo.

Asimismo, el magnate destaca en favor de los ‘consols’ que el dinero recaudado no tendría que distribuirse de acuerdo con la clave fiscal, es decir, la ‘participación accionarial’ de los Estados miembros en el BCE, sino que puede asignarse en mayor medida a los que más lo necesiten, como los países del Sur de Europa, que han sido los más afectados por la pandemia.

Por otro lado, desde el punto de vista legal, para que la emisión de estos instrumentos sea factible, Soros recuerda que la UE debe mantener su calificación ‘AAA’, lo que obliga a que los Veintisiete cuenten con «suficientes recursos propios», es decir, impuestos cuya recaudación cubriese el coste del servicio de los bonos.

En este caso, reconoce que gravar con impuestos a cada miembro de la UE es un proceso complicado, porque cada país tiene sus propias reglas y, en algunos países, como Bélgica, estas son muy complicadas y el proceso tomaría varios años, aunque apunta que la solución a este problema pasa por que los impuestos «solo tienen que autorizarse, no hace falta implementarlos», lo que reduciría a unas pocas semanas el proceso de autorización necesario para que la UE emitiese después los ‘consols’.

«Los bonos perpetuos tienen unas enormes ventajas frente a los bonos con fecha de caducidad. Tal como su nombre implica, el principal nunca tiene que pagarse, sino solamente los intereses anuales. Tal como mencioné anteriormente, esa cantidad es tan pequeña que podría ser aprobada fácilmente por los Estados miembros. Esto debería ser particularmente atractivo para la Liga Hanseática, liderada por Holanda», afirma.

En este sentido, Soros destaca el papel a desempeñar por Angela Merkel, a quien, como canciller alemana, considera «la única persona que puede invalidar al ‘establishment’ ordoliberal» y opina que, con su apoyo, la Cumbre del próximo 27 de mayo podría aceptar los bonos perpetuos como una alternativa deseable a explorar, aunque advierte de que «el tiempo se agota».

«Las circunstancias excepcionales exigen medidas excepcionales. Los bonos perpetuos son una medida excepcional. En condiciones normales ni siquiera se deberían considerar. Pero si la UE es incapaz de tenerlos en cuenta ahora, es posible que no sobreviva a las dificultades que sufre en la actualidad», advierte Soros.