El problema de la España rural: desplazarse y pagar por sacar dinero

El cierre de oficinas bancarias y cajeros automáticos se ha acelerado desde la crisis de 2008 y si hay una víctima clara en este proceso de ajuste son los habitantes de las zonas rurales y en concreto, los mayores.

Los habitantes de municipios pequeños tienen que desplazarse varios kilómetros para poder sacar dinero. Pero el problema se agrava cuando el banco más cercano no coincide con el del interesado y entonces tiene que pagar una comisión para poder retirar efectivo. Esta asciende normalmente a 2 euros.

Según los últimos datos del Banco de España (BdE), más del 50% de los españoles sigue usando dinero en efectivo en el día a día. Los datos muestran que en 2019 se ha notado una ligera caída (ganando algo de peso las transacciones digitales) pero hasta que la cifra no baje considerablemente, los españoles seguirán necesitando ir al banco a hacer sus retiradas.

Al inicio de 2018, 4.109 municipios carecían de oficinas, afectando al 2,7% de la población española, y la región más afectada era Castilla y León. Una cifra que aumentó en 2018, cuando ya eran 4.196 municipios sin sucursales, esto son 1.3 millones de habitantes afectados o el 2,8% de la población española.

En el caso de los cajeros, la cosa ha mejorado pero no se ha solventado. Al arrancar 2018, había 50.839 cajeros automáticos instalados en España, un año más tarde la cifra ascendía a 51.391. Sin embargo, 3.393 municipios no tienen acceso a efectivo. Esto es, un millón de habitantes o un 1,8% de la población.

El estudio del BCE destaca que los cajeros automáticos son la principal fuente de obtención de efectivo de los consumidores. Suponen un 61% frente al 8% que acuden a las ventanillas bancarias. Y además, el 20% de los encuestados señalan que retiran dinero de cajeros o del banco dos o tres veces al mes.

POBLACIÓN EN RIESGO

Existe una población en riesgo, las personas que viven en zonas rurales. La situación más crítica la tienen los municipios que han perdido la única oficina bancaria de la que disponían. A principio de 2018, 4.109 municipios españoles ya no disponían de sucursal, lo que significa que 1.249.407 habitantes no contaban con ningún servicio bancario en su zona de residencia.

Pero el BdE puntualiza que se trata, en general, de municipios pequeños, ya que casi 200 tienen menos de 30 habitantes y más de 500, menos de 50. Y, en muchos casos, están próximos a otros municipios en los que encontrar una sucursal bancaria o un cajero automático. Las comunidades con mayor número de municipios sin oficina bancaria son Castilla y León, seguida de Castilla-La Mancha, Cataluña y Aragón.

Para compensarlo, la banca ha desarrollado otros canales, como las oficinas móviles (ofibuses), o agentes financieros que de vez en cuando atienden a los clientes en aquellos puntos donde ya no existe oficina bancaria.

EXCLUSIÓN FINANCIERA

El sector bancario vive una paradoja. Por una parte, se han instalado un elevado número de cajeros en puntos de gran afluencia de personas, como los centros comerciales, los aeropuertos o las estaciones de tren. Los llamados cajeros desplazados.

Mientras un millón de personas no pueden ni sacar dinero en su pueblo (exclusión financiera). Además, el acceso al efectivo no puede ser cubierto como otros servicios bancarios a través de la banca electrónica. Y a su vez, hay municipios donde no se admite el pago con tarjeta y todo se paga en efectivo.

En este sentido, el interesado tiene que hacer un recorrido de varios kilómetros y sacar dinero en el cajero más cercano, que si no coincide con el de la entidad de éste le cobrará una comisión que va desde los 1,85 euros del Santander hasta los 2 euros del BBVA.

ACUERDO O NEOBANCO

Hay ciudades (como Granada o Badajoz) que tratan de resolver este asunto llegando a acuerdos con bancos para instalar cajeros en municipios excluidos, con subvenciones, cediendo espacios públicos o asumiendo los costes.

También hay entidades como ING, Abanca o Bankia que tienen acuerdos con otras entidades para que sus clientes puedan retirar efectivo gratis. Y por otra parte están los neobancos como Bnext, N26 o Revolut que permiten sacar dinero gratis de cualquier cajero (aunque un número limitado de veces al mes) ya que no disponen de oficina.