Kate Middleton volvió a emocionar sin necesidad de grandes anuncios ni discursos oficiales. Lo hizo de manera discreta, personal y profundamente simbólica, presentándose el sábado por la noche en el Ever After Garden, un espacio mágico situado en Londres que cada año, en estas fechas, se transforma en un mar de rosas blancas iluminadas para rendir homenaje a quienes han perdido la vida a causa del cáncer y para recaudar fondos destinados a la investigación oncológica. Su presencia, inesperada y cargada de significado, se convirtió en un mensaje directo de apoyo y esperanza para todas las personas que están luchando contra la enfermedad.
1La reaparición de Kate Middleton
El jardín, que permanece abierto del 13 de noviembre al 16 de diciembre, invita a los visitantes a donar y dedicar una rosa a un ser querido, convirtiendo cada flor en un recuerdo y en un gesto solidario. Kate recorrió el espacio con calma, se detuvo a hablar con los voluntarios que mantienen viva la instalación durante semanas y quiso participar como una más en el homenaje colectivo. La princesa de Gales dedicó su propia rosa, en la que podía leerse un mensaje tan sencillo como contundente: “En amorosa memoria de todos aquellos que perdieron la vida a causa del cáncer”. Unas palabras que resumen el espíritu de la iniciativa y que reflejan una vivencia personal que ha marcado su último año.
Antes de marcharse, Kate dejó también un mensaje escrito de su puño y letra, dirigido a todas las personas implicadas en el proyecto. “Gracias a todos los que han contribuido al Ever After Garden, que recauda fondos vitales para la Royal Marsden Cancer Charity. Cada flor, cada luz, es un recuerdo unido, una luz de amor compartido, recuerdo y esperanza”, escribió, firmando únicamente con la letra “C”, un gesto íntimo y alejado de cualquier formalismo institucional. Un mensaje que ha sido interpretado como un guiño directo a quienes atraviesan procesos de enfermedad o duelo.
La iniciativa, lanzada en 2019, se ha consolidado como uno de los eventos solidarios más relevantes del calendario londinense. Desde su creación ha logrado recaudar 1,6 millones de libras, una cifra que refleja el compromiso ciudadano con la causa. Solo este año, las donaciones destinadas a la Royal Marsden Cancer Charity ascienden a 400.000 libras, gracias al trabajo incansable de 400 voluntarios que se encargan de mantener el jardín en funcionamiento durante todo el mes. Un esfuerzo colectivo que Kate quiso reconocer de forma expresa con su presencia.
