La entidad bancaria ING continuó su racha de mejoras este trimestre, elevando nuevamente sus previsiones para 2025, gracias al continuo crecimiento de sus volúmenes de préstamos y de sus ingresos por comisiones. Esto, sumado a la disciplina en costes, le permitió al banco superar las expectativas en un 14% antes de impuestos, y alcanzar una rentabilidad sobre recursos propios muy sólida del 15%.
En este sentido, la banca europea se está convirtiendo cada vez más en un negocio de escala, e ING aspira a tener una de las mejores plataformas de banca minorista continental del mercado, lo que convierte al banco no solo en una inversión macroeconómica sólida, sino también en una historia de crecimiento escalable con una política de distribución fuerte, generosa y predecible.
Los analistas de AlphaValue han realizado sus propias previsiones para 2025, «integramos los resultados del tercer trimestre y revisamos al alza nuestras proyecciones de ingresos en todas las divisiones, excepto en Banca Minorista en Alemania, donde nuestras expectativas de crecimiento ya eran elevadas. Las mejoras más notables en los ingresos se registraron en Banca Minorista en los Países Bajos».

LA INTRAHISTORIA DEL CRECIMIENTO DE ING
ING siempre ha demostrado una gran capacidad para captar clientes en mercados seleccionados donde veía potencial para su plataforma de banca minorista digital, favoreciendo los mercados fragmentados con baja penetración de la banca digital y grandes flujos de ingresos sin explotar como en el caso de Alemania o Italia.
«Tras analizar los tres primeros trimestres de ING, se ha confirmado nuestra predicción. Sin embargo, subestimamos considerablemente la capacidad del banco para monetizar su creciente cartera de clientes, aprovechando la venta cruzada para aumentar los ingresos por comisiones individuales de cada cliente, lo que aceleró el crecimiento de dichas comisiones y, al mismo tiempo, transformó la base de depósitos del banco en nuevos préstamos, reduciendo así la sensibilidad del banco a su margen de interés neto y, a su vez, la sensibilidad de este último a las fluctuaciones de los tipos de interés», apuntalan desde AlphaValue.
ING está captando una cuota de mercado cada vez mayor en los ahorros de sus clientes
Asimismo, al ser un banco con una fuerte presencia digital, ING está captando una cuota de mercado cada vez mayor en los ahorros de sus clientes, ofreciendo atractivos servicios bancarios digitales integrales y utilizando campañas de marketing en forma de incentivos en las tasas de depósito para aumentar el número de clientes.
Los resultados de un ING más digital, son un crecimiento sostenido de los depósitos y préstamos de los clientes en cualquier circunstancia, gracias a la estrategia de priorizar los depósitos, que ha permitido mantener una ratio estable del 80% entre los préstamos y los depósitos, lo que convierte a la banca minorista de ING en una de las más solventes.

Entre las ventajas de esta situación se incluyen una baja volatilidad de los depósitos y una menor presión sobre los márgenes de depósitos del banco, lo que le otorga mayor margen de maniobra en cuanto a la fijación de precios de los productos y el crecimiento del volumen.
Por otro lado, hay otra vía de monetización de clientes que ha estado llevando a cabo la entidad financiera. Concretamente, ING ha estado desarrollando una atractiva estrategia de comisiones durante los últimos trimestres, aprovechando eficazmente los flujos de sus clientes en un entorno de tipos de interés a la baja, gracias a la ampliación de su oferta de productos, especialmente en servicios de inversión, así como en seguros.
LA TECNOLOGÍA Y EL APROVECHAMIENTO DEL CAPITAL
Los bancos conciben cada vez más sus negocios como plataformas tecnológicas que despliegan en diversos mercados, adaptándolas a las realidades locales. Esto se acentúa aún más en el caso de un banco digital como ING, que, tras numerosas iteraciones para consolidarse en el mercado local, está reduciendo su coste marginal por cliente y sus volúmenes, al igual que cualquier producto tecnológico.
No obstante, si a esto se le suma el impulso de los últimos años hacia una infraestructura de datos más sólida, la creciente automatización de los procesos de principio a fin y el impulso de la IA en toda la oferta de productos del banco, que se había vuelto negativa con la bajada de los tipos, los expertos prevén que vuelva a ser positiva, respaldada por nuevas medidas de racionalización de costes.

Por otro lado, en cuanto al aprovechamiento de la generación de capital excedente, ING ofrece ahora una de las políticas de distribución de dividendos más generosas y predecibles entre los bancos de Europa continental. Concretamente, la entidad distribuye un dividendo a cuenta, además del dividendo final.
El objetivo es alcanzar una política de reparto del 50%, complementada con dividendos extraordinarios y frecuentes recompras de acciones, con una actualización cada dos trimestres. El último anuncio de este tipo se realizó durante los resultados del tercer trimestre de 2025, cuando ING anunció una distribución de 1.600 millones de euros (aproximadamente el 2,5% de la capitalización de mercado del grupo), que incluía 500 millones de euros en dividendos extraordinarios y 1.100 millones de euros en recompras de acciones.








