La decisión que ha tomado Alejandra Rubio en plena transformación vital apunta directamente a un cambio de rumbo para su joven familia y, de paso, podría convertir en millonaria a Marta López. La colaboradora de televisión ha puesto en venta su conocida vivienda unifamiliar, pero lo verdaderamente llamativo es que la persona interesada en comprarla no sería otra que la hija de Terelu Campos, quien estudia dar un paso definitivo hacia una residencia más amplia y estable ahora que su vida está completamente centrada en su maternidad. El próximo 6 de diciembre, Alejandra y su pareja, Carlo Costanzia, celebrarán el primer cumpleaños de su hijo, un año marcado por cambios profundos, nuevas responsabilidades y un giro absoluto en sus prioridades personales y profesionales. En este escenario, la revista Lecturas ha revelado en exclusiva que la joven está dispuesta a adquirir un hogar a la altura de esta nueva etapa y que la casa elegida sería, precisamente, la de Marta López, que lleva semanas preparando su mudanza a otra vivienda.
2Una casa de 1.3 millones de euros
La colaboradora evitó mencionar el precio exacto de la vivienda, pero Pliego no tuvo inconveniente en compartirlo en directo. Según explicó, la casa estaría valorada en 1,3 millones de euros, una cifra que situaría a Marta en una posición económica privilegiada si la venta se concreta. Ella misma reconoció que la vivienda “es preciosa” y que le encantaría que terminara en manos de alguien que verdaderamente la apreciara. La intención de Marta es mudarse a otra casa que se adapte mejor a sus necesidades actuales, por lo que la operación encaja para ambas partes: una necesita vender y la otra desea comenzar una nueva vida en un espacio amplio y con posibilidades de futuro.
La decisión de Alejandra llega en un momento especialmente dulce para ella y para Carlo, pese a todas las críticas que han recibido desde que hicieron pública su relación. En los primeros meses, muchos dudaron de la estabilidad del vínculo, y cuando anunciaron que iban a ser padres la desconfianza se multiplicó. Sin embargo, el tiempo ha servido como un test sólido que han superado juntos y con convicción. Tras el nacimiento de su hijo, ambos han afianzado una convivencia sólida, centrada en el bebé pero también en el crecimiento profesional de cada uno. Su familia se ha convertido en su mayor prioridad, algo que explicaría la búsqueda de una casa más amplia y definitiva donde poder organizar su vida con mayor comodidad.
La buena sintonía de la pareja se ha reflejado recientemente en la celebración del cumpleaños de Carlo, quien prefirió disfrutar del momento sin prestar demasiada atención al móvil. Aun así, sus redes sociales dejaron entrever la alegría de la velada en un local de Madrid donde se reunió con algunos de sus amigos más íntimos. La presencia de Alejandra fue esencial en la celebración, ya que fue ella quien mostró la tarta que prepararon para soplar las velas y quien compartió algunos detalles de los regalos que recibió su pareja. Entre los asistentes también estuvieron Carlo Costanzia padre y Terelu Campos, demostrando que la relación familiar atraviesa un momento equilibrado y cordial. La gran ausencia fue Mar Flores, cuya distancia respecto a ciertos actos familiares ya se ha convertido en una constante.
