lunes, 17 noviembre 2025

Drew Barrymore y su profunda reflexión: “Nunca hablaría a la pequeña Drew como a veces me hablo a mí misma”

La actriz se abre sobre la autocrítica, el niño interior y la necesidad de tratarnos con más compasión emocional.

Drew Barrymore, la famosísima actriz de Hollywood, ha compartido recientemente un momento íntimo y revelador en redes: confesó que a veces se habla con dureza a sí misma, con palabras que nunca le permitiría dirigir a su versión más joven. Bajo una serie de fotos de su infancia y su etapa adulta, la actriz de 50 años utilizó su voz para recordarse (y recordarnos) que la autocrítica constante puede ser tan dañina como innecesaria. Esta reflexión no solo conecta con su propio pasado, sino con una tendencia muy humana: esa voz interna implacable que muchos luchan por silenciar.

Para Drew, la conversación sobre el “niño interior” no es solo simbólica, sino un ejercicio real de sanación. En sus palabras, la pequeña Drew “estaba dando lo mejor de sí misma” en aquel momento, aunque se sintiera insegura o minimizada. Pero hoy la Drew adulta reconoce que se dice frases como “todo es mi culpa” o “soy muy intensa”, actitudes que la psicología moderna considera contraproducentes para el bienestar emocional. Reconocerlo es un paso, cambiarlo es otro aún más valioso.

Publicidad

La autocrítica de Drew Barrymore: un espejo emocional difícil de ignorar

YouTube video

Barrymore no oculta que cargó con una autocrítica implacable durante gran parte de su vida. Ha admitido públicamente que fue su propio juez y que ha necesitado tiempo para aprender a ser amable consigo misma. En su reflexión reciente, sostiene que la compasión no es solo una palabra bonita, sino una práctica: hablarse con dignidad, como si estuvieras cuidando a tu yo más joven, puede cambiar la forma en que afrontamos el fracaso, la duda o la culpa.

Este tipo de autoevaluación no viene de la nada. Parte de su pasado —crecer como estrella infantil, pasar por momentos difíciles y tener que enfrentarse a su propia vulnerabilidad— ha dejado huellas. Al decir que no usaría las mismas palabras para la pequeña Drew, Drew Barrymore está reconociendo que esas heridas no solo existen, sino que resuenan con fuerza cada día, y que merecen una respuesta más empática.

Sanar el pasado desde el presente: autocompasión y crecimiento

Más allá de la autocrítica, la reflexión de Drew Barrymore tiene un propósito claro: fomentar la autocompasión. Porque reconocer que nos hablamos mal no basta; hay que construir un diálogo interno más amable, con el que nos sintamos más a gusto y a la larga nos dé la confianza necesaria para seguir hacia adelante. En su mensaje, invita a que no descartemos la posibilidad de cambiar esa voz interior hiriente por una que nos respete, que nos entienda y que nos anime a continuar.

Drew Barrymore
La actriz, Drew Barrimore, en una entrevista reciente

También sugiere que este tipo de conversación puede ayudarnos a reconectar con nuestro niño interno: esa parte de nosotros que soñaba, que era vulnerable y que necesitaba afirmaciones. No es un ejercicio de victimismo, como algunos usuarios han sugerido, sino de responsabilidad emocional: reparar el ciclo de autoexigencia puede ser liberador y ser parte de un proceso de crecimiento profundo.

En definitiva, la reflexión de Drew Barrymore sobre la autocrítica no es solo inspiradora: es un llamado a tratarnos mejor. Al reconocer que a veces somos nuestra peor crítica, los que más daño nos hacemos a nosotros mismos, la actriz propone un cambio quizá radical pero necesario: hablarse con ternura, como lo haríamos con alguien que nos importa profundamente, y a quien aconsejaríamos de la mejor manera posible, teniendo tacto y cuidado para que nuestros consejos no le hundan. Porque en un mundo que exige perfección, tal vez su mensaje sea uno de los más valiosos: no basta con sobrevivir, también tenemos derecho a perdonarnos.


Publicidad