Según el abogado Alberto García Cebrián, de Abogados Cebrián, los bancos presumen de fines sociales, pero no devuelven el dinero ilegalmente cobrado a sus propios clientes. Sus proclamas no se corresponden con sus hechos y es algo que manipula la percepción de la sociedad y condiciona a sus clientes potenciales.
(P). ¿A qué te refieres cuando hablas de «el gran paripé de los bancos»?
(R) Todos vemos publicidad en la que las entidades bancarias se hacen autobombo. Muestran una versión buenista de sí mismos como si fueran una entidad de interés social, cuando realmente es un paripé que se muestra con cierta hipocresía.
(P). ¿Por qué crees que los bancos tienen una actitud hipócrita?
(R) Se gastan dinero en anuncios que en muchos casos ensalzan los fines sociales en los que supuestamente destinan parte de sus beneficios. Nos tratan como si fuéramos idiotas. En la crisis de 2008 dejaron en la calle a miles de familias que no pudieron pagar la hipoteca. Después el Estado rescató a los bancos con el dinero de los españoles. Ahora resulta que hay miles de familias que tienen que meterse en un juicio para reclamar la devolución de las cláusulas abusivas de sus hipotecas. Incluso en breve se producirá una reclamación a los bancos de miles de familias con hipotecas con IRPH que previsiblemente tendrán que volver a reclamar a los bancos judicialmente para que le devuelvan aquello que nunca le debieron cobrar. Es vergonzoso.
(P). ¿Por qué piensas que los bancos nos tratan como si fuéramos idiotas?
(R) Los bancos se atreven a decir que confiemos en ellos a pesar de que nos han engañado con cláusulas abusivas que no nos devuelven extrajudicialmente, como sería lo normal. Lo decente sería que si un banco nos ha cobrado cláusulas nulas de pleno derecho que jurídicamente nunca han producido efecto, que tuvieran la consideración de devolver dicho dinero indebidamente cobrado.
Ya no hablamos de la vulnerabilidad de personas mayores, de personas que no saben de cuestiones bancarias, sino de la posición de superioridad que tienen los bancos ante un potencial cliente que necesita una hipoteca y que está predispuesto a firmar casi lo que sea con tal de acceder al crédito hipotecario.
(P). ¿Qué opinas de actuación de los bancos en la crisis de 2008?
(R) La actuación de los bancos en la crisis de 2008 que en gran parte ellos mismos provocaron fue lamentable. Cuando los clientes pedían préstamos eran tratados con una falsa amabilidad en la que incluso les animaban a pedir más dinero de hipoteca para irse de vacaciones, comprarse un coche o reformar el piso. Fue algo indecente y temerario. Quien pidió un préstamo antes de que explotara la crisis del ladrillo lo sabe.
Después ejecutaron a los clientes que no pudieron hacer frente a la hipoteca y en muchos casos les dejaron en la calle, sin casa y con grandes deudas que limitaba la capacidad de que las familias vivieran dignamente. Muchos directores fueron cambiados de oficinas para evitar la tensión que creaba que la persona que nos animaba a pedir más dinero después fuera la que nos quitara la casa y dejara en muchos casos en la ruina.
(P). ¿Qué opinas del rescate de los bancos?
(R) El rescate de los bancos fue un despropósito. Es cierto que por no haber hecho bien las cosas muchas entidades bancarias entraron en una situación insostenible. Pero además de haberles salvado la papeleta con dinero de los ciudadanos a los que les estaban quitando las casas, habría que haber establecido límites y condiciones.
Las familias deberían de haber quedado más protegidas. Se salvaron entidades bancarias que siguieron ejecutando las hipotecas de muchas familias que después de colaborar involuntariamente para salvar a las entidades bancarias, veían como se especulaba con sus casas de las que les despojaban sin una normativa que les protegiera. Se salvo a las entidades financieras, pero no se preocuparon de proteger adecuadamente a las familias.
(P). ¿Las familias tienen que reclamar judicialmente a los bancos?
(R) En inentendible que los bancos cobren aquello que no deben en base a cláusulas nulas por abusivas y que no devuelvan el dinero voluntariamente. El hecho de que los clientes tengan que reclamar para que les devuelvan lo que le han cobrado de más es vergonzoso.
Es algo rentable para los bancos, pues muchos clientes no reclaman y ese dinero que se ahorran devolver, pero el peaje para las familias supone un daño irreparable pues se ven en la necesidad de contratar abogados y procuradores y estar años hasta conseguir que le devuelvan su dinero. En este contexto que los bancos presuman de fines sociales es una postura hipócrita e inaceptable.

(P). ¿Qué está previsto que pase con las reclamaciones de devoluciones de hipotecas con índice de IRPH?
(R) Al igual que ya paso con otras cláusulas reclamadas nulas, por abusivas, los bancos van a tener que devolver grandes cantidades de dinero y no está previsto que lo hagan extrajudicialmente. Están especulando con dinero ilegalmente cobrado. Se trata de un dinero que necesitan las familias y que en vez de estar en su bolsillo están en las arcas de los bancos.
A los bancos eso les da igual, no suelen acceder a las devoluciones y no sufren las reclamaciones judiciales. Las familias afrontan un peaje muy caro en tiempo, dinero y sufrimiento que se deriva de cualquier proceso judicial.
(P). ¿Qué solución o alternativas podría haber ante esta situación?
(R) La única solución sería que los clientes nos plantáramos. Que dejáramos de contratar aquellos productos de bancos que no ofrezcan la devolución del dinero de las familias. Si existiera unión en los clientes los bancos no tendrían más remedio que hacer un nuevo paripé, pensando en sus propios intereses y devolver el dinero como deberían de haber hecho desde el momento en el que se declaró que se habían cobrado cláusulas abusivas.
(P). ¿Crees que los fines sociales que dicen defender los bancos son hipócritas?
(R) Son absurdos. Si devolvieran el dinero ilegalmente cobrado a los clientes las entidades ya cumplirían con su obligación. Con el dinero que les sobrará podrían hacer fines sociales, pero no devolver el dinero indebidamente cobrado a las familias es antisocial. Elegir fines sociales sin tener la decencia de devolver el dinero que tanto necesitan las familias directamente es un daño social.
Primero deberían de devolver aquello que nunca debieron cobrar. Tendrán que facilitar canales de reclamación. Pero hay muchos intereses en esta situación. Miles de familias sienten indignación por la imposición de cláusulas abusivas.
Además, es más injusto aún sentir que no te van a devolver tu dinero si no lo reclamas judicialmente. Pero lo más bochornoso de esta situación es que los bancos tiendan a gastarse el dinero en lavar su imagen con campañas de fines sociales sin preocuparse de devolver aquello que debería de ser prioritario, el dinero que necesitan miles de personas para llegar a fin de mes y cubrir sus necesidades más elementales.

El sector bancario tiene mala imagen de la sociedad, pero debería de ser peor aún si calara el mensaje de que nos han engañado cobrando condiciones abusivas y no deberíamos conformarnos y deberíamos exigir que nos trataran dignamente.
La inflación está dificultando la vida de las familias que cada vez se enfrentan a situaciones más precarias. Que en ese sentido millones de euros estén en las arcas de los bancos en vez de estar en la cuenta de los clientes, del que nunca debió salir, es bochornoso. Es como si un jefe le dice a un empleado que se queda con parte de su dinero sin su permiso y le propone seguir manteniendo una relación laboral cordial, valiéndose de la liquidez de quedarse con parte de su dinero.







