José Manuel Ribera Casado, geriatra: “Tratar a los mayores como niños no es ternura, es falta de respeto”

El prestigioso geriatra español reflexiona sobre los prejuicios hacia las personas mayores y defiende una atención médica y social basada en el respeto y la autonomía

José Manuel Ribera Casado, geriatra: “Tratar a los mayores como niños no es ternura, es falta de respeto”

Cuando la sociedad se refiere a las personas mayores, en ocasiones lo hace desde un tono que combina gusto, pena y paternalismo. Pero y si eso que entendemos por buenismo no es sino el último bastión de una discriminación sutil? José Manuel Ribera Casado, uno de los exponentes de la geriatría en España, se atreve a cuestionar dicha perspectiva: «El paternalismo es una forma de discriminación hacia las personas mayores». Ribera realiza una balanza de las innovaciones de su especialidad, se opone al edadismo y exige una relación más digna, respetuosa y madura con quienes han superado una determinada edad.

LA DIVERSIDAD MÁS ALLÁ DE LA EDAD

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Fuente: Freepik

Otro de los ejes centrales de la explicación de Ribera es que no existe una sola forma de envejecer, tal como no existen unas únicas formas de ser personas. En la entrevista que hace al médico, este enfatiza que las personas mayores no constituyen un conjunto homogéneo, ya que cada una de ellas arrastra una historia clínica, social, cultural o familiar bien distinta.

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Por este motivo, incide en la necesidad de una medicina geriátrica que no se limite a “tratar lo viejo”, sino a considerar factores múltiples en el mismo individuo capaz de llevar a cabo un abordaje por el entorno, por la autonomía, por las relaciones afectivas o por el grado de actividad. Asimismo, Ribera recuerda que el término “geriatría” surge precisamente para evidenciar esta diferencia —que los ancianos no son adultos con más edad—, y no para encasillar a la persona en una categoría monolítica.

Gracias a los trabajos pioneros de personajes como Marjory Warren, la madre de la geriatría moderna, se llegó a vislumbrar que el abordaje de los múltiples factores condicionantes de la salud de los mayores lleva a mejores resultados, a estancias hospitalarias más cortas y a menos complicaciones. Eso, quizás, fue lo que les llevó a rechazar la vieja costumbre de ver solo el síntoma o la enfermedad, ignorando el contexto.

RIBERA CASADO, DEL PATERNALISMO A UNA RELACIÓN MADURA

José Manuel Ribera Casado, geriatra: “Tratar a los mayores como niños no es ternura, es falta de respeto”
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Para Ribera, el paternalismo, o sea, el instinto de cuidar, proteger o decidir “por” el mayor, puede ser un tipo de discriminación sutil. En su teorización, denuncia expresiones tan inofensivas como “abre los ojitos”, las expresiones indiscriminadas de “abuelo” o la tendencia a suponer que “no se enteran”. Todas son rasgos del tono condescendiente que baja dignidad. Confundir cuidar con controlar es un engaño que puede desgastar la autoestima de muchos mayores.

Por ello llama a protestar, a manifestarse y a decir que se nos tiene que tener en cuenta aun con el peso que los años suponen. Pero el cambio no depende únicamente de la lengua, implica un cambio institucional, profesional y cultural. Ribera sostiene que hace falta una formación más específica en geriatría, más investigadores de la especialidad y reconocimiento en el seno del sistema sanitario.

En España, contrapone, faltan geriatras en términos absolutos y relativos; una especialidad aprobada hace años, pero que no ha crecido al ritmo que sería necesario. También defiende que los médicos tienen que integrar en su práctica criterios bioéticos más claros: priorizar la autonomía, no basar decisiones en criterios arbitrarios en función de la edad y hacer espacios de deliberación con el paciente.