En una operación sin precedentes, la Policía Nacional interceptó un barco mercante a 600 millas de las Islas Canarias que transportaba 6.500 kilos de cocaína en sus bodegas. El abordaje, ejecutado con apoyo de la Armada Española, fue retransmitido por la propia institución, que mostró el momento exacto en el que los agentes tomaron el control del buque.
La operación, coordinada por la Policía y dirigida por la Fiscalía Especial Antidroga de la Audiencia Nacional, se desarrolló tras una alerta internacional de la agencia estadounidense DEA. La información apuntaba a una organización criminal que planeaba llevar una gran cantidad de droga hacia el puerto de Vigo utilizando una embarcación de bandera tanzana.
Una operación internacional que comenzó con una alerta
El pasado 8 de octubre, la Policía española recibió el aviso procedente de la DEA, que advertía sobre los movimientos de una organización dedicada al narcotráfico transatlántico. La investigación permitió identificar el barco nodriza, un “supply ship” que había partido del puerto panameño de Cristobal Anch rumbo a España.
A partir de ese momento, la Policía diseñó un operativo preciso para interceptar el cargamento antes de que alcanzara las costas nacionales. Durante días, los agentes siguieron el trayecto del mercante hasta confirmar su posición exacta en aguas internacionales.
La Policía, junto con las Fuerzas Armadas, desplegó un buque de la Armada desde el que efectivos del Grupo Especial de Operaciones (GEO) realizaron el abordaje. La acción tuvo lugar a las 21:30 horas del 22 de octubre, cuando el equipo táctico irrumpió en la cubierta del navío de 54 metros de eslora.
En el interior, los agentes de la Policía encontraron a los nueve tripulantes, que fueron detenidos de inmediato. Durante la primera inspección, se hallaron compartimentos ocultos y estructuras no propias de un barco de carga, donde posteriormente se localizaron las toneladas de cocaína.
Policía nacional: el golpe al narcotráfico y la cooperación entre fuerzas
La Policía destacó que este operativo fue posible gracias a la coordinación internacional y a los sistemas de cooperación con agencias extranjeras. La colaboración con la DEA y la Armada Española permitió actuar con rapidez y precisión en una zona de difícil acceso.
Según fuentes policiales, esta operación representa un golpe significativo para las redes de narcotráfico que intentan introducir droga en Europa desde América Latina. La Policía considera que la organización desmantelada formaba parte de una estructura mayor, dedicada al envío constante de grandes cantidades de cocaína a través del Atlántico.
Las imágenes del abordaje, difundidas por la Policía en sus redes sociales, muestran la magnitud del operativo: agentes armados, helicópteros sobrevolando la zona y el momento exacto de la intervención. Un despliegue que demuestra la capacidad y la preparación de las fuerzas españolas frente al crimen organizado.
