jueves, 30 octubre 2025

Gerardo Soto (48 años), aventurero y periodista: «Les voy a enseñar a hacer cerveza en casa en menos de 5 minutos»

Gerardo Soto, periodista y aventurero de 48 años, comparte una receta rápida y accesible para elaborar cerveza artesanal en casa en menos de cinco minutos, sin equipos costosos, priorizando la simplicidad, la calidad y el placer de crear.

En los últimos años, la elaboración artesanal ha dejado de ser un simple pasatiempo para transformarse en una verdadera pasión. Cada vez más personas buscan reconectarse con los procesos manuales y el placer de crear con sus propias manos. En este contexto, Gerardo Soto, periodista y aventurero de 48 años, sorprende con una propuesta diferente: enseñar a preparar cerveza en casa en menos de cinco minutos, sin necesidad de equipos costosos ni conocimientos previos.

El comunicador, que combina su curiosidad periodística con una enorme afición por la experimentación, ha desarrollado una receta sencilla, práctica y al alcance de cualquiera. Con apenas unos pocos ingredientes y un poco de paciencia, asegura que es posible disfrutar de una cerveza artesanal con cuerpo, aroma y espuma dignos de una fábrica profesional.

Publicidad

Una receta simple para disfrutar de una cerveza sin complicaciones

Una receta simple para disfrutar de una cerveza sin complicaciones
Fuente: agencias

El primer paso de este mini curso casero comienza con los ingredientes básicos: extracto de malta en polvo, lúpulo, levadura y cuatro litros de agua mineral o de manantial. Según Soto, el secreto está en utilizar productos de calidad y seguir las proporciones exactas. “Usamos medio kilo de extracto de malta, 25 gramos de lúpulo El Dorado y una levadura especial que no requiere activación previa”, explica.

El procedimiento no podría ser más simple. En una botella de cinco litros, se mezclan los ingredientes y se agita durante unos segundos para integrarlos por completo. Luego, se deja fermentar en un rincón oscuro de la cocina entre dos y cuatro días. Durante este tiempo, la levadura hace su trabajo: transforma los azúcares del extracto de malta en alcohol y genera las primeras burbujas que anticipan la textura final de la cerveza.

A diferencia de los métodos tradicionales que requieren ollas, termómetros y largas horas de hervor, esta propuesta elimina por completo la complejidad. Gerardo Soto insiste en que la cerveza artesanal no debe ser un privilegio de los expertos, sino una experiencia accesible y divertida para todos.

El arte de esperar: de la fermentación al brindis

YouTube video

Tras la fermentación inicial, llega el momento de agregar el resto del lúpulo, responsable del amargor y del aroma cítrico característico. Luego, la mezcla se guarda en la nevera por cinco días para que la cerveza se aclare y adquiera su tono dorado. El siguiente paso es el envasado y la carbonatación: por cada litro, se añaden diez gramos de azúcar para generar el gas carbónico que le da vida a la espuma.

Las botellas se dejan reposar a temperatura ambiente durante dos semanas, tiempo en el que la cerveza termina de madurar. Finalmente, se enfría y se sirve: una bebida artesanal, ligera y refrescante, con notas cítricas y un amargor suave, ideal para acompañar un asado o compartir entre amigos.

El propio Soto confiesa que su primera cerveza no fue perfecta, pero el encanto está precisamente en el proceso. “Hacer cerveza artesanal es una forma de experimentar, de equivocarse y de volver a intentarlo”, comenta con entusiasmo. Su receta demuestra que, con curiosidad y ganas de aprender, cualquier cocina puede transformarse en una pequeña fábrica de sueños fermentados.


Publicidad