Se acerca Halloween, y con él, una nueva temporada de empleos escalofriantes e irresistibles. El mes más oscuro del año se ha convertido en una gran oportunidad laboral para los más valientes y menos supersticiosos. Parques de atracciones, discotecas, centros comerciales, rodajes, escape rooms y hasta cementerios buscan personal dispuesto a enfrentarse al miedo (y disfrutarlo). En estas fechas tan señaladas, InfoJobs, la plataforma líder de empleo en España presenta una selección de empleos ‘terroríficos’ que combinan trabajo, diversión y un entorno inmejorable.

EMPLEOS REALMENTE ESPELUZNANTES
En Halloween no todo consiste en disfrazarse o pedir caramelos. También hay quien se gana la vida entre sustos, sangre falsa y cementerios. Estos son algunos de los perfiles más originales y escalofriantemente divertidos de la temporada:
- Maquillador/a de Halloween: Especialista en ojeras, heridas de película y pieles más pálidas que pasar todo un lunes sin café. Imprescindible dominar el arte del látex y saber que, si hablamos de sangre falsa, nunca es suficiente.
- Actor/actriz de pasaje del terror: Si te encanta gritar, arrastrarte por el suelo o aparecer de golpe detrás de una puerta, puedes hacerte un hueco entre los puestos de asistentes para varias áreas que suelen ofrecer los parques de atracciones en estas fechas. Se valoran los sustos bien cronometrados y la resistencia a los gritos del público (y a algún que otro ‘bolsazo’ que se puede recibir en defensa propia).

- Vigilante de cementerio: Ideal para quienes buscan un empleo tranquilo, muy tranquilo, tanto si se trata de trabajar en un camposanto lleno de historia o en uno moderno. Se requiere discreción, linterna y gusto por la soledad. Eso sí, ten en cuenta que este empleo tiene los turnos de noche incluidos.
- Decorador/a de escenarios de terror: Convierte el local más aburrido y convencional en un escenario de pesadilla o esculpe las calabazas más siniestras para la ocasión. Las calaveras, los ataúdes, los maniquíes siniestros y las luces estroboscópicas serán tus herramientas de trabajo. Si te gusta hacer tareas manuales y te apasiona Halloween, este es tu empleo.
- Catador/a de caramelos de Halloween: El sueño de cualquier niño: las marcas de dulces buscan testers para probar sabores terroríficamente deliciosos, las galletas más espantosas y las chocolatinas más escalofriantes. Solo hay que tener estómago.
- Probador/a de fiesta: El trabajo soñado de cualquier persona enamorada de la fiesta y de Halloween. Disfruta viendo los disfraces de los asistentes, mientras les asustas y bailas escalofriantemente bien.
OPORTUNIDADES QUE PARECEN DE OTRO MUNDO
Más allá de Halloween, el mes de octubre saca a la luz cada año profesiones que parecen increíbles, pero que cumplen una función tan necesaria como divertida. Desde fabricar sangre a tiempo completo hasta guiar a grupos entre apariciones paranormales, hay empleos que demuestran que la imaginación también tiene su sitio en el mercado laboral.
- Monitor de escape room: Los monitores de escape room son los verdaderos héroes del pánico: controlan cada pista, cada pasillo, cada luz, cada cerradura o prueba, sin morir de miedo en el intento. Si eres ingenioso y no te importa organizar las pruebas más retorcidas, este empleo es para ti.
- Operario/a de producción de sangre artificial: Sí, hay personas que fabrican sangre. Su trabajo es mezclar, probar y embotellar litros del líquido rojo más demandado del mes. No apto para aprensivos ni vampiros.

- Guía de rutas paranormales: Perfecto para quienes disfrutan contando historias y viendo cómo los demás mueren de miedo. Se puede trabajar tanto en grandes mansiones abandonadas, como en barrios históricos o los ya citados cementerios. Se valoran las voces graves y la capacidad de mantener la compostura ante ruidos aterradores.
- Asistente de médium: Ayuda a organizar sesiones de tarot, colocar velas y mantener el ambiente místico. No se garantiza contacto con el más allá, pero sí muchas anécdotas.
Halloween demuestra que el trabajo también puede ser una experiencia de miedo, pero de las buenas. Desde el maquillaje más sangriento hasta la decoración más tenebrosa, las empresas buscan creatividad, improvisación y ganas de pasarlo de en grande. Porque si algo nos enseña esta época es que no hay nada más terrorífico que no pasarlo bien.








