miércoles, 22 octubre 2025

Lorena Ramos (39), consultora de inteligencia artificial: “Solo con tu cara en Instagram pueden abrir cuentas a tu nombre en menos de 5 minutos. Si no configuras este ajuste, pronto tendrás una deuda imposible de pagar”

El uso de Instagram se ha convertido en una extensión casi natural de nuestra vida social, un diario visual donde compartimos momentos sin apenas pensarlo. Lo que no imaginamos es que, según advierten expertos como Lorena Ramos, nuestra propia cara se ha transformado en la principal vulnerabilidad para suplantaciones de identidad ultrarrápidas. Esta consultora en inteligencia artificial lanza una seria advertencia sobre un riesgo que crece en silencio mientras navegamos por este escaparate digital sin la debida precaución. ¿Estamos realmente seguros en la red?

Puede que pienses que tu perfil es inofensivo, una simple colección de recuerdos y aficiones sin mayor trascendencia. Sin embargo, Lorena Ramos afirma que los ciberdelincuentes utilizan ya inteligencias artificiales que solo necesitan una imagen clara para iniciar un proceso de fraude que puede arruinarte la vida. La promesa de que pueden hacerlo en menos de cinco minutos no es una exageración, sino una nueva y alarmante realidad. La pregunta ya no es si podría pasarte, sino si estás preparado para evitarlo en la popular red social.

Publicidad

EL PELIGRO SILENCIOSO QUE YA ESTÁ EN TU MÓVIL

YouTube video

La comodidad de compartir nuestra vida en imágenes ha traído consigo un riesgo que apenas empezamos a comprender. El verdadero problema no reside en la aplicación en sí, sino en cómo herramientas externas recopilan masivamente imágenes públicas para entrenar algoritmos de reconocimiento facial sin nuestro consentimiento. Cada foto subida a Instagram con el perfil en abierto es, potencialmente, una pieza más en un gigantesco puzle biométrico que otros pueden usar con fines maliciosos, una amenaza invisible que muchos ignoran por completo.

Lorena Ramos insiste en un punto crucial que a menudo pasamos por alto en la vorágine de las redes. La experta explica que la mayoría de usuarios comparte fotografías sin ser consciente del rastro biométrico que están dejando accesible a cualquiera en la plataforma de Meta. No se trata solo de una imagen bonita de tus vacaciones; es un mapa detallado de tus rasgos faciales, una firma única que, en las manos equivocadas, se convierte en una llave maestra para acceder a tu vida privada y financiera.

¿POR QUÉ TU CARA ES MÁS VALIOSA QUE TU CONTRASEÑA?

Hemos pasado años obsesionados con crear contraseñas seguras, combinando letras, números y símbolos para proteger nuestras cuentas. Sin embargo, el paradigma ha cambiado drásticamente con los avances tecnológicos. Ahora tu rostro es el dato más codiciado, porque a diferencia de una clave, no se puede cambiar, y los sistemas de verificación biométrica son cada vez más comunes en bancos, administraciones y servicios online. Tu cara en una foto de Instagram se ha vuelto un activo digital de incalculable valor.

Esta nueva realidad nos obliga a repensar nuestra seguridad digital desde cero, yendo mucho más allá de la simple protección de una contraseña. El motivo es que una inteligencia artificial puede crear un ‘deepfake’ o una identidad sintética convincente a partir de pocas imágenes de alta calidad obtenidas de tu perfil social. Con esa identidad falsa, un delincuente puede solicitar créditos, abrir cuentas o incluso superar controles de seguridad que antes considerábamos infranqueables, dejando una deuda a tu nombre.

LA ESTAFA DE LOS 5 MINUTOS: ASÍ TE ROBAN LA IDENTIDAD

YouTube video

La velocidad a la que operan estos fraudes es, quizás, lo más aterrador de todo el proceso. Lorena Ramos detalla un escenario que parece de ciencia ficción pero que ya es una realidad tangible. Un ciberdelincuente solo necesita encontrar una foto nítida de tu cara en tu perfil público de Instagram, algo que para muchos es una tarea de segundos. A partir de ahí, el mecanismo del engaño se pone en marcha a una velocidad vertiginosa que te deja sin capacidad de reacción.

Con esa imagen, el estafador utiliza un software de inteligencia artificial para generar un documento de identidad falso pero hiperrealista. El siguiente paso es usarlo para darse de alta en un neobanco o solicitar un microcrédito online, procesos que a menudo están automatizados y apenas requieren supervisión humana. Así es como, en menos tiempo del que tardas en tomar un café, pueden generar una deuda a tu nombre utilizando tu propia cara como prueba de identidad. El uso de Instagram de forma descuidada facilita enormemente este tipo de ataques.

EL AJUSTE CLAVE QUE INSTAGRAM NO QUIERE QUE CONOZCAS

Frente a esta amenaza, la solución no pasa por abandonar las redes sociales, sino por usarlas de forma inteligente y consciente. Existe una configuración fundamental que actúa como un escudo protector, pero que una gran parte de los usuarios desconoce o simplemente no activa. Lorena Ramos subraya que la medida más eficaz y sencilla es configurar tu cuenta de Instagram como privada, impidiendo que cualquiera pueda acceder a tus fotos y vídeos. Es el primer y más importante paso para blindar tu identidad.

Pero no basta solo con eso para protegerte por completo del uso indebido de tus imágenes. La experta en IA recomienda ir un paso más allá y revisar quién puede etiquetarte. Por ello, es crucial activar la opción de ‘aprobar etiquetas manualmente’ para evitar que tu imagen aparezca en perfiles de terceros sin tu control. Este pequeño gesto te devuelve el poder sobre tu propia imagen en esta aplicación, cerrando una puerta que muchos delincuentes aprovechan para recopilar datos biométricos sin que te des cuenta.

BLINDA TU CUENTA AHORA: PASOS PARA NO SER LA PRÓXIMA VÍCTIMA

YouTube video

La sensación de vulnerabilidad puede ser abrumadora, pero tomar el control es más fácil de lo que parece. Blindar tu perfil de Instagram no requiere conocimientos técnicos avanzados, solo unos minutos de tu tiempo. Empieza por revisar de arriba abajo tu lista de seguidores y elimina a cualquiera que no conozcas o no te genere confianza. A menudo, aceptamos solicitudes de extraños sin pensar en las consecuencias, convirtiendo nuestro perfil en una ventana abierta para ojos indeseados.

El último paso para fortalecer tu seguridad en Instagram es ser extremadamente selectivo con lo que publicas. Piensa dos veces antes de subir esa foto perfecta en la que tu rostro se ve con total claridad, sobre todo si tu perfil no es privado. Recuerda que, en el mundo digital actual, cada publicación es un dato que entregas voluntariamente y que puede ser utilizado de formas que ni imaginas. Proteger tu identidad empieza por la prudencia y la conciencia del valor que tiene tu propia cara en la era de la inteligencia artificial.


Publicidad