
La ciudad malagueña se convirtió el pasado 25 de enero de 2024 en el núcleo de la discusión sobre el futuro de la Medicina de Urgencias y Emergencias en especialidad. Más de 250 médicos internos residentes (MIR) se dieron cita en la IV Jornada SEMES MIR, organizada por la Sociedad Española de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES), bajo el sugerente lema de “Por el futuro de la Especialidad”. Este encuentro, que vuelve a adquirir su carácter nacional una década después, no sólo ha funcionado como foro de aprendizaje, sino que también ha servido de plataforma de reivindicación para una especialidad que, a pesar de su papel central, no tiene todavía reconocimiento en nuestro país.
LA VOCACIÓN QUE SE APRENDE EN PRIMERA LÍNEA

Durante los dos intensos días en los que los jóvenes médicos se reunieron, participaron en más de veinte ponencias y talleres sobre temas como el tratamiento de la sepsis, el ictus, la crisis asmática o la balanza de la insuficiencia cardíaca. Los distintos talleres de ventilación mecánica no invasiva y soporte vital avanzado o arritmias con todos los asistentes despertaron gran interés, llegando a encontrarlas como formación aplicada y real. “Saber qué hacer y cómo actuar en una situación crítica marca la diferencia entre la vida y la muerte”, hizo saber el doctor Santiago Toranzo, coordinador de SEMES MIR, en el acto inaugural de este encuentro.
Uno de los momentos más curiosos fue el del curso de atención a los periodistas en el que aprendieron a reconocer una parada cardiaca y realizar reanimación cardiopulmonar (RCP) con calidad. Recordó la doctora Uxía Fernández, coordinadora también de SEMES MIR, que por cada minuto sin RCP, la posibilidad de sobrevivir, se reduce un 10%, por lo que hizo hincapié en que la divulgación y la formación sobre reanimación y primeros auxilios son necesarias, y deben hacerse extensivas a toda la sociedad.
UNA ESPECIALIDAD AUN SIN NOMBRE EN ESPAÑA

El gran tema de fondo que fue recurrente en cada uno de los debates fue el mismo: la ausencia de una especialidad en Medicina en Urgencias y Emergencias. España continúa siendo uno de aquellos pocos países europeos que NO poseen esta formación reglada y, por ende, un gran vacío en la preparación de sus profesionales. Según el Informe Oferta-Necesidad de Especialistas Médicos 2021-2035, más del 53% de los urgenciólogos superará los 50 años en el 2035, convirtiéndose en el colectivo médico más envejecido del país. Esta cuestión tiene una gravedad directa sobre la calidad asistencial y sobre el relevo profesional.
Muchos MIR son conscientes de su verdadera vocación en el momento de pasar por los servicios de urgencias y tienen que aprender de forma autodidacta debido a la falta de itinerarios de formación. “Muchos compañeros hacen otra especialidad y luego se ponen a aprender por su cuenta cómo atender un ictus o cómo atender a un paciente con parada cardíaca”, relató el presidente de SEMES y el doctor Tato Vázquez Lima, que también puntualizó que aprender por este otro camino NO sustituye en absoluto a la formación que debería dar el sistema. A esta falta de formación también hay que añadir otra barrera: los médicos que se han formado en urgencias en otros países europeos no pueden ejercer en España como tales.