Raquel Mosquera ha vuelto a situarse en el centro de la atención mediática, pero esta vez no por un nuevo proyecto profesional ni por un conflicto televisivo, sino por una difícil situación personal que la mantiene en vilo. La empresaria y exmujer de Pedro Carrasco atraviesa uno de los momentos más delicados de su vida tras conocerse que su marido, Isi, se encuentra detenido en Francia por causas que todavía no se han hecho públicas. Lejos de esconderse o guardar silencio, Mosquera ha decidido dar un paso al frente y hablar con claridad sobre lo que está viviendo, sus emociones y la decisión firme que ha tomado respecto a su matrimonio.
3Este es el mensaje de Raquel Mosquera

El mensaje de Raquel ha tenido una gran repercusión, no solo entre sus seguidores, sino también entre muchos compañeros de profesión que han querido mostrarle su apoyo. A pesar del torbellino mediático, la peluquera se mantiene tranquila, centrada en su trabajo y en sus hijos, y confía en que pronto podrá conocer la verdad sobre lo que ha ocurrido. Su círculo más cercano afirma que está intentando llevar la situación con serenidad, apoyándose en su familia y en su fe, una constante en su vida. Lo cierto es que Raquel Mosquera siempre se ha caracterizado por su resiliencia y capacidad de superación. Desde su mediática relación con Pedro Carrasco hasta su faceta televisiva, ha sabido reinventarse en los momentos más duros y mantenerse fiel a sí misma. Esta nueva prueba no parece haberla quebrado; al contrario, ha reforzado su determinación y su deseo de demostrar que, pese a las circunstancias, su vida sigue adelante con entereza.
En su entorno aseguran que la presentadora y empresaria no tiene dudas sobre la inocencia de su marido y que está convencida de que todo se aclarará. Mientras tanto, continúa con su rutina en España, cuidando de sus hijos y atendiendo su negocio, con la esperanza de poder reencontrarse pronto con Isi y cerrar este difícil capítulo. “Siempre he creído que la verdad sale a la luz”, habría comentado a una amiga, reafirmando su confianza en el tiempo y en la justicia. Así, entre la preocupación y la fortaleza, Raquel Mosquera ha decidido tomar el control de su propia historia, sin dejar que las especulaciones o los juicios externos la definan. Fiel a su carácter luchador, mantiene la cabeza alta y el corazón firme, esperando el momento de mirar a su marido a los ojos y conocer, por fin, toda la verdad.