Jorge Fernández ha dejado a todos sin palabras al hablar abiertamente sobre uno de los momentos más difíciles de su vida. El presentador de ‘La ruleta de la suerte’ se sinceró en el programa Y ahora Sonsoles con Sonsoles Ónega sobre la enfermedad de Lyme que sufrió hace años y que casi le obliga a abandonar su carrera televisiva. Confesó que durante aquella época llegó a derramar lágrimas antes de entrar a grabar y que estuvo al borde de una fuerte depresión, aunque nunca dejó el programa que tantos años le ha acompañado.
3Un mensaje importante

A pesar de la gravedad de aquel episodio, el presentador transmite un mensaje positivo: incluso en los peores momentos es posible encontrar fuerza y esperanza. Jorge Fernández demostró que la disciplina, la meditación y el apoyo familiar son herramientas fundamentales para superar enfermedades complejas y que la resiliencia es clave para retomar el control de la vida. Su historia también sirve de ejemplo de la importancia de la prevención y de no ignorar síntomas que, en apariencia, podrían parecer menores, pero que pueden afectar gravemente a la salud física y mental de una persona.
Con más de 20 años de experiencia frente a las cámaras, Jorge Fernández ha demostrado que detrás de la sonrisa y la cercanía que transmite en televisión existe una persona fuerte, capaz de enfrentar desafíos extraordinarios y de salir fortalecido. Su relato sobre la enfermedad de Lyme deja ver no solo su vulnerabilidad, sino también su determinación y valentía, convirtiéndose en un testimonio inspirador para quienes enfrentan dificultades similares. Gracias a su fuerza y disciplina, el presentador recuperó su vida, su carrera y su pasión por el entretenimiento, consolidándose como una figura respetada y querida por el público y por sus compañeros.
En definitiva, la confesión de Jorge Fernández sobre la enfermedad de Lyme ha dejado a todos los espectadores conmovidos y ha abierto una ventana a su vida personal que hasta ahora pocos conocían. Su capacidad para superar la adversidad, mantener la profesionalidad y recuperar su bienestar físico y emocional convierte su historia en un ejemplo de coraje, resiliencia y esperanza. Con lágrimas, esfuerzo y disciplina, ha logrado no solo curarse, sino también volver a la televisión con la misma energía y entusiasmo que lo caracterizan, dejando claro que incluso los peores momentos pueden superarse con determinación y apoyo.