El mercado inmobiliario en la provincia de Guadalajara experimenta un notable incremento en los precios de la vivienda, impulsado en gran medida por la influencia de la cercanía con Madrid. En septiembre de 2025, el precio medio del metro cuadrado en Guadalajara se situó en 1.436 euros, lo que representa un aumento del 1,2% respecto al mes anterior, un 5,3% en comparación con junio y un significativo 13% respecto a septiembre de 2024.
La ciudad de Guadalajara, con un precio medio algo superior que la provincia, alcanzó en septiembre un valor de 1.971 euros por metro cuadrado, mostrando una subida del 20% en el último año. Estos incrementos evidencian el fuerte dinamismo del mercado inmobiliario local, motivado en parte por el fenómeno conocido como ‘efecto dormitorio’, que refiere a la demanda creciente de viviendas en ciudades cercanas a grandes núcleos urbanos como Madrid.
SIN LÍMITES
La ciudad no quiere limitarse a ser simplemente un lugar donde se duerme para trabajar en la capital. Este año, las autoridades locales han puesto en marcha un ambicioso proyecto urbanístico para modificar el Plan de Ordenación Municipal (POM), con el objetivo de lograr un desarrollo equilibrado y sostenible.
La iniciativa busca no solo incrementar la oferta de vivienda, especialmente para los jóvenes, sino también fomentar la generación de empleo de calidad que permita que Guadalajara sea una ciudad completa, con actividad económica propia y no un mero satélite residencial de Madrid.
El arquitecto, urbanista y sociólogo encargado de liderar este proyecto, José María Ezquiaga, destaca que el reto principal es encontrar un equilibrio entre vivienda y empleo. La existencia de suelo disponible en la provincia abre una oportunidad para que Guadalajara se posicione como un actor relevante dentro de la conurbación metropolitana que se está configurando alrededor de Madrid.
La meta es atraer actividad económica y mejorar la calidad de vida, evitando que la ciudad se convierta en una opción secundaria con viviendas de menor calidad. Para garantizar que este desarrollo responda a las necesidades reales de la población, se ha puesto especial atención en recoger la opinión de los vecinos, quienes expresaron inquietudes sobre la revitalización del centro histórico y la manera de aprovechar las ventajas que ofrece la proximidad a Madrid y a otras zonas de la región.

El futuro de Guadalajara, según los responsables del plan, pasa por aprovechar sus recursos singulares, entre los que destaca un entorno natural poco deteriorado, algo cada vez más escaso en el área metropolitana madrileña. Esto, sumado a una estrategia urbanística que integre empleo y vivienda asequible, podría consolidar a Guadalajara como una ciudad atractiva y sostenible, más allá del efecto dormitorio.
EL PLAN
Además del notable aumento en los precios de la vivienda, Guadalajara enfrenta el desafío de gestionar un crecimiento urbano que responda a las necesidades reales de su población. La ciudad busca avanzar hacia un modelo de desarrollo equilibrado que garantice tanto acceso a viviendas dignas como oportunidades laborales cercanas, sin depender exclusivamente de Madrid.
La actualización del Plan de Ordenación Municipal se centra en planificar un crecimiento ordenado, respetando el entorno natural y la calidad de vida de los habitantes. El proyecto incluye la creación y mejora de infraestructuras básicas, como el transporte público, espacios verdes, equipamientos culturales y sociales, para fortalecer la vida comunitaria y fomentar la cohesión vecinal.
La intención es que Guadalajara mantenga su identidad propia, evitando convertirse en un lugar donde solo se vive para trabajar en otra ciudad. La disponibilidad de suelo y un entorno poco degradado son ventajas que la ciudad quiere aprovechar para consolidar un espacio urbano más inclusivo, accesible y respetuoso con el medio ambiente.