miércoles, 8 octubre 2025

AENA cede al Taxi y pide registro de reservas a Uber, Cabify y Bolt en el Prat

Uber, Cabify y Bolt pierden otra batalla frente al taxi en Barcelona

La situación del aeropuerto de Barcelona se ha convertido en una de las historias de trasfondo más importantes de la Ciudad Condal alrededor de la nueva ley del taxi. El espacio privilegiado en el estacionamiento por el que Uber, Cabify y Bolt han pagado casi 8 millones de euros a AENA exigirá ahora que los conductores de VTC muestran la reserva de viaje para que puedan utilizarlo.

El problema hasta ahora es que muchos lo utilizaban como espacio de descanso, e incluso esperaban en la zona por la solicitud de un viaje, lo que generaba la molestia de los taxistas, por qué perdían la ventaja de la inmediatez frente a las plataformas y por el tráfico que generaba en el parking del estacionamiento.

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La nueva exigencia está pensada para solventar este problema, esto sin generar la complicación que los conductores de estas plataformas tienen en zonas como Andalucía, donde al no tener un espacio propio en el aeropuerto los conductores se ven obligados a pagar el uso del parking en primera instancia, a la espera de que las plataformas cubran el gasto posteriormente. Es un pequeño alivió a pesar de la nueva limitación, aun si la situación es otro recordatorio de la tensión permanente entre los conductores de Uber, Cabify y Bolt y los taxistas en la capital catalana. 

Es que la medida de exigir las reservas de viajes para utilizar su espacio en el aeropuerto ha llegado mientras se espera que avance la nueva ‘ley taxi’ de Salvador Illa. El borrador del texto, diseñado claramente para expulsar las plataformas de la «Nueva Movilidad» de la Generalitat, con la idea de proteger al taxi. Es un texto controvertido, que no solo ha causado molestia entre directivos y conductores de las nuevas VTC, sino también entre otros sectores que se verían afectados por la reducción de las opciones de transporte en la ciudad, como el ocio nocturno y la hostelería. 

En cualquier caso, la situación del aeropuerto solo era un ejemplo más de esta tensión. Desde la aprobación del espacio, las organizaciones más beligerantes del sector del taxi, encabezadas por la siempre controvertida Élite Taxi, acusaron a la propia AENA de haber dado prioridad al dinero por encima del servicio público, aun así el espacio se había mantenido en lo que Uber, Cabify y Bolt siguen considerando uno de los puntos más importantes de la geografía española, sobre todo para captar viajeros que visitan el país con motivos turísticos. Son espacios que miman con especial cuidado, y donde entienden que son necesarios puntos de recogida.

EL TAXI MANTIENE SU PULSO CON AENA POR LOS ESPACIOS DEL AEROPUERTO

Lo cierto es que no es el único motivo del taxi para mantener su molestia con AENA, sobre todo alrededor de las instalaciones de El Prat en Barcelona. En los últimos años, han protestado también por el estado de sus espacios de descanso, la falta de baños y la poca presencia de trabajadores para ayudar en la zona donde deben recoger a los pasajeros. Ha sido motivo de rabia para los taxistas hace tiempo, y de momento no hay una solución clara a la vista.

Vehículo de Uber en Madrid. Fuente: Agencias
Vehículo de Uber en Madrid. Fuente: Agencias

El que apareciera el nuevo espacio para Uber, Cabify y Bolt ha sido motivo extra para expresar su molestia. En los últimos años, el principal aeropuerto de Cataluña ha sido también hogar de marchas lentas de los taxis, protestas grupales e incluso han llegado a reducir al mínimo sus operaciones en el mismo. Es una situación que en líneas generales no se ha repetido en Madrid y el resto de los grandes aeropuertos del país. En esa realidad es difícil ignorar el poder que siguen teniendo en la Generalitat, y en particular en Barcelona, y la presión que han sabido ejercer para que se aprueben las leyes que buscan. 

UBER, CABIFY Y BOLT SIGUEN BUSCANDO SOLUCIONES PARA CATALUÑA

En cualquier caso, esta situación puede estirarse solo hasta la aprobación del borrador de ley que ya está en el Parlament. Uber, Cabify y Bolt saben que tras su aprobación la situación de la Generalitat cambiará de manera radical, y que no podrá seguir operando con normalidad, como lo han hecho hasta ahora. Aun así, cada una de las empresas ha buscado formas de mantener su presencia de marca en Cataluña, y en particular en Barcelona, una de las ciudades clave de su negocio a nivel español. 

Cabify ha conseguido rescatar unas 250 licencias en tribunales, Uber está captando taxistas, compitiendo con Free Now y Bolt no solo imita esta estrategia, sino que ha decidido ser una de las empresas más vocales en criticar el texto de la nueva ley. De momento siguen esperando, pero es evidente que el panorama inmediato de la Generalitat no es especialmente positivo para estas plataformas de transporte. 


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