La OCU lo advierte cada verano, pero miles de viajeros siguen cayendo en la misma trampa que convierte unas vacaciones soñadas en una auténtica pesadilla económica. Imagina la escena: llegas al mostrador de la compañía de alquiler, cansado del viaje y con ganas de empezar a disfrutar, y es justo ahí, en ese momento de vulnerabilidad, cuando un empleado te presiona para que contrates un seguro adicional carísimo. ¿Te suena familiar? Pues lo que no te cuentan es que podrías estar pagando dos veces por lo mismo.
Ese paraíso de calas recónditas y pueblos blancos te espera, pero antes debes enfrentarte a un contrato lleno de letra pequeña diseñado para confundir. La promesa de una «cobertura total» es el cebo perfecto, pero esta asociación de usuarios alerta de que la realidad es muy diferente, ya que la mayoría de los seguros a todo riesgo básicos incluyen una franquicia desorbitada que puede superar los mil euros. Sigue leyendo y descubre el secreto que las compañías de alquiler de coches no quieren que sepas antes de tu próximo viaje por España.
LA GRAN MENTIRA DEL «TODO RIESGO» QUE PAGAS DOBLE

La primera sorpresa desagradable llega con un concepto que muchos pasan por alto: la franquicia. Puede que tu reserva online incluyera un seguro a todo riesgo, pero lo que no destacaba era esa cifra oculta, ya que la franquicia es la cantidad máxima que deberás pagar de tu bolsillo si el coche sufre algún daño, incluso si no es culpa tuya. Un simple arañazo en un aparcamiento puede convertirse en un cargo de 600 euros en tu tarjeta, un aviso de la OCU que se repite constantemente.
Es entonces, con el susto en el cuerpo, cuando la compañía te ofrece la solución mágica: su seguro premium para eliminar esa franquicia. El problema, según la advertencia de la organización, es que muchas tarjetas de crédito ya ofrecen un seguro de alquiler que cubre precisamente esa franquicia, por lo que podrías estar contratando una cobertura que ya tienes. Revisa las condiciones de tu tarjeta antes de viajar, porque ese gesto te puede ahorrar más de doscientos euros.
¿FRANQUICIA CERO? CUIDADO, EL DIABLO ESTÁ EN LOS DETALLES
Has decidido pagar el extra para tener «franquicia cero» y viajar con total tranquilidad. Crees que estás blindado ante cualquier imprevisto, pero la realidad es tozuda y las exclusiones del contrato, también. Según los expertos en consumo, la cobertura total casi nunca incluye daños en neumáticos, lunas, espejos, bajos o el techo del vehículo, que casualmente son algunas de las averías más comunes. Un pinchazo o un retrovisor roto seguirán saliendo de tu cuenta bancaria.
Pero la cosa no acaba ahí. Incluso con el seguro más completo, prepárate para un bloqueo considerable en tu tarjeta de crédito. Es otro punto que la OCU señala con insistencia en sus informes, porque las compañías retienen un depósito que puede alcanzar los 1.500 euros como garantía frente a posibles multas, peajes o daños no cubiertos. Este bloqueo reduce tu crédito disponible durante las vacaciones, un detalle que puede causar más de un quebradero de cabeza.
EL JUEGO SUCIO DEL DEPÓSITO DE GASOLINA: MÁS CARO QUE LLENARLO DE CHAMPÁN

¿Te suena la política «lleno-vacío»? Huye de ella como de la peste. Con esta modalidad, te entregan el coche con el depósito lleno y te lo cobran en el momento, pero aquí viene la trampa denunciada por asociaciones de consumidores, ya que el precio por litro que te aplican suele ser mucho más caro que en cualquier gasolinera, y además te suman una «tasa de servicio por repostaje» totalmente injustificada. Acabarás pagando una fortuna por un combustible que ni siquiera gastarás por completo.
La opción justa y transparente es siempre la política «lleno-lleno». Te dan el coche con el tanque a rebosar y simplemente debes devolverlo en las mismas condiciones. El consejo de la OCU es claro: busca compañías que ofrezcan esta modalidad y, al devolver el vehículo, localiza una gasolinera cercana al aeropuerto para rellenar el depósito y guarda el tique como prueba. No dejes que te cobren un solo céntimo de más por la gasolina.
LOS EXTRAS QUE ENGORDAN LA FACTURA: DE LA SILLA DEL NIÑO AL SEGUNDO CONDUCTOR
A veces, el precio base del alquiler es solo un señuelo para atraer clientes. La factura final se dispara con una serie de extras cuyos precios son, en muchos casos, un auténtico abuso. Una recomendación de la OCU es planificar con antelación estos detalles, porque alquilar una silla de retención infantil durante dos semanas puede costarte más que comprar una nueva. Si viajas con frecuencia o tienes familia en tu destino, valora seriamente esta opción.
Otro de los extras que más encarecen el precio final es la inclusión de un segundo conductor. Las tarifas varían enormemente entre compañías, pero no es raro que te cobren más de diez euros por día. Los análisis de la organización de defensa del consumidor demuestran que esta tarifa adicional a menudo no se muestra de forma clara durante el proceso de reserva online, apareciendo como una sorpresa de última hora en el mostrador. Lee siempre la letra pequeña antes de confirmar.
LA INSPECCIÓN FINAL: TU MEJOR ARMA CONTRA CARGOS INESPERADOS

Antes de meter la llave en el contacto por primera vez, dedica cinco minutos a una inspección exhaustiva del vehículo. Este es un protocolo que la OCU siempre recomienda y que puede ahorrarte disgustos, ya que grabar un vídeo detallado del exterior y el interior del coche es tu principal prueba para evitar que te culpen de daños preexistentes. No te fíes del parte de daños que te entreguen; busca por ti mismo cualquier roce, abolladura o mancha en la tapicería y asegúrate de que quede registrado. La OCU insiste en que esta es tu mejor defensa.
Al finalizar tu viaje, no tengas prisa por dejar las llaves y correr hacia la terminal. Solicita que un empleado de la compañía revise el coche contigo y te firme un documento de conformidad que certifique que lo has devuelto en perfecto estado. El consejo final de la OCU es vital para tu tranquilidad, porque ese papel firmado es el finiquito de tu contrato y tu garantía contra reclamaciones futuras por daños imaginarios que arruinen el recuerdo de un viaje perfecto por España.