En la actualidad, todos confiamos en el banco como el lugar donde nuestro dinero “descansa” seguro. Sin embargo, pocos se detienen a pensar qué ocurre realmente con ese dinero una vez que lo ingresamos. Aunque la mayoría imagina billetes guardados en una caja fuerte, la realidad es muy diferente.
Comprender qué hace el banco con los depósitos es fundamental para entender cómo funciona el sistema financiero. Lejos de ser un simple guardián, estas entidades financieras cumplen un papel activo: administra, presta e invierte los fondos de sus clientes, generando beneficios y movimiento económico a gran escala.
2Seguridad y control del dinero en los bancos
A pesar de que el dinero físico no se conserva en su totalidad, los depósitos están protegidos. En España, el Fondo de Garantía de Depósitos asegura hasta 100.000 euros por titular y por banco. Es decir, incluso si una entidad quiebra, los ahorros dentro de ese límite están garantizados por el Estado.
Además, los bancos deben cumplir estrictas regulaciones impuestas por el Banco de España y la Unión Europea, que controlan sus operaciones, solvencia y liquidez. Esto asegura que las entidades mantengan un equilibrio entre los fondos disponibles y los préstamos concedidos.
Por otro lado, las entidades también invierten en tecnología y sistemas de seguridad digital para proteger las cuentas y operaciones de los clientes, especialmente en un contexto donde la mayoría de los movimientos ya son electrónicos.
Con la digitalización, el concepto de dinero físico está desapareciendo. Hoy, la mayoría de las transacciones son simples apuntes contables, respaldados por la confianza en el sistema bancario. El banco se ha transformado en un gestor de datos, operaciones y servicios financieros, más que en un custodio de billetes y monedas.