Luis Rivera, conocido mundialmente como Bori Barber, es peluquero, tiene 31 años y una historia que parece sacada de una película. Nació en Patillas, Puerto Rico, y a los 12 años se mudó con su padre a Miami, donde comenzó un camino que lo llevaría desde recortar a escondidas en los pasillos de su escuela hasta atender a figuras del deporte y la música en su propio salón de lujo.
La vida del peluquero cambió para siempre en un momento que él mismo describe como divino e imaginable: «Cuando le corté el pelo a Messi empecé a llorar y me pregunté ¿cómo Dios me coge a mí para esta vaina?».
3Más que un peluquero

Hoy, desde su salón en Miami —un espacio que une la barbería con el estilismo y que dirige junto a su esposa, Mónica—, este peluquero no solo corta cabellos. Forma, inspira y motiva a nuevas generaciones de jóvenes que ven en él una prueba de que los sueños sí se cumplen.
“Yo no me considero el número uno, pero sé que estoy haciendo algo bien porque inspiro. Cuando una madre me escribe diciendo que su hijo volvió a tener esperanza tras escuchar mi historia, ahí es cuando entiendo que todo valió la pena”, dijo.