lunes, 22 septiembre 2025

Blefaroplastia: la cirugía que devuelve juventud… y visión

Cada vez más personas recurren a la cirugía de párpados no solo para mejorar su aspecto, sino también para recuperar calidad de vida. La blefaroplastia, una intervención que elimina el exceso de piel y grasa en los párpados, ha dejado de ser un secreto reservado a celebridades para convertirse en uno de los procedimientos más solicitados en los quirófanos estéticos y oftalmológicos. Y no es casualidad.

Más de 30.000 personas al año en España se someten a una blefaroplastia, una intervención que deja de ser exclusiva del ámbito estético para consolidarse como una solución funcional ante problemas visuales provocados por el envejecimiento de los párpados. Se ha convertido en una aliada silenciosa pero poderosa para quienes buscan no solo verse mejor, sino también vivir mejor.

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Los párpados caídos o con bolsas no son solo una cuestión de apariencia. Con el paso del tiempo, la piel pierde elasticidad y firmeza, generando una caída progresiva del párpado superior que en algunos casos llega a afectar la visión. La blefaroplastia, tradicionalmente asociada a fines cosméticos, se ha convertido en una herramienta clave para mejorar la calidad de vida de muchos pacientes. Hablamos con diversos médicos de hospitales del grupo Quirónsalud que lideran esta tendencia, tanto con cirugía convencional como con técnicas láser sin bisturí, desde esta doble perspectiva.

El rejuvenecimiento de los párpados tiene un efecto rejuvenecedor de la cara”, subraya el Dr. Marco Amaya Benítez, Jefe de Servicio de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora en el Hospital Quirónsalud Valle del Henares. “Muchas veces los pacientes no son conscientes de cuánto les afectaba esta caída hasta que se lo quitamos”, añade.

Cirugía breve, resultados duraderos

La blefaroplastia convencional es una intervención sencilla, de corta duración y rápida recuperación. El Dr. Miguel Jaraíz, Cirujano plástico especializado en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora en el Hospital Quirónsalud Cáceres y en el Hospital Quirónsalud Clideba, en Badajoz, explica que “es una de las técnicas más agradecidas para los pacientes, ya que se trata de un procedimiento que no requiere mucho tiempo de quirófano, entre 50 y 60 minutos”.

Este procedimiento se realiza con anestesia local y sedación, lo que permite que el paciente se marche a casa el mismo día. “La recuperación del paciente es de 6 o 7 días, que es el plazo en el que se le retiran los puntos. Puede aparecer algún tipo de moratón que también en 6-7 días se ha resuelto”, detalla el Dr. Jaraíz. “Es un procedimiento que ha tenido un incremento enorme con la pandemia. La gente se ha mirado más al espejo y se ha dado cuenta de que tenía unos párpados dignos de una blefaroplastia”, comenta con humor.

Desde la Policlínica Gipuzkoa, la Dra. Pilar Albero, Cirujana Plástica, Estética y Reparadora destaca otro aspecto fundamental: la naturalidad. “La clave está en que la intervención respete la identidad facial del paciente. No se trata de cambiar la mirada, sino de devolverle su vitalidad”, señala.

Láser de CO₂: el futuro es ahora

Aunque la cirugía convencional sigue siendo la más habitual, el Hospital Quirónsalud Málaga ha incorporado una técnica pionera que ha revolucionado el tratamiento: la blefaroplastia sin cirugía. Este procedimiento, realizado con láser de CO₂ fraccional ablativo, elimina el exceso de piel sin incisiones, solo con anestesia tópica.

El láser otorga una mayor precisión con menor riesgo de lesión iatrogénica de las estructuras adyacentes, con anestesia local, menor sangrado intraoperatorio y menor tiempo de la intervención, así como reducción del edema y del hematoma postoperatorio que supone una incorporación más rápida del paciente a su actividad diaria”, explica el Dr. Salvador Molina, oftalmólogo del centro.

Entre las principales ventajas, destaca una recuperación de apenas una semana, la mínima inflamación y la ausencia de cicatrices visibles. “En ambos casos, se puede realizar esta blefaroplastia con menos riesgo y tiempo de recuperación, gracias a equipos innovadores como nuestro láser de CO₂ Sweetlase, que permite el procedimiento de forma mínimamente invasiva”, añade el especialista.

¿Para quién está indicada?

Aunque suele asociarse con personas de entre 45 y 65 años, cada vez es más frecuente ver a pacientes jóvenes en consulta. “Hay pacientes jóvenes que, por factores hereditarios, presentan piel redundante y bolsas en los párpados de forma precoz”, comenta el Dr. Amaya.

La intervención se adapta a cada caso, pudiendo realizarse sobre los párpados superiores, inferiores, o ambos. En algunos casos, la cirugía actúa también sobre la musculatura palpebral para reforzar su estructura y prevenir nuevas caídas con el tiempo.

La Dra. Albero lo resume así: “Las pacientes buscan suavizar esa mirada cansada o triste sin alterar su identidad, y la blefaroplastia permite justamente eso: un cambio sutil que respeta la esencia del rostro”.

Una mirada que dice más

La piel de los párpados es la más fina del cuerpo humano. Con la edad, sufre más intensamente la pérdida de colágeno y elastina, dando paso a arrugas, flacidez y bolsas. Esto, sumado a la acción de la gravedad, genera una apariencia de fatiga crónica. Pero también puede provocar molestias físicas: pesadez, tensión ocular o pérdida de campo visual. “No es solo una cuestión de estética, sino de recuperar parte del campo visual que la edad nos ha ido robando”, insiste el Dr. Jaraíz.

Así, la blefaroplastia, en sus diferentes versiones, se consolida como una herramienta médica al servicio del bienestar integral. Y con tecnologías como el láser de CO₂, el acceso a este tipo de intervenciones es cada vez más amplio, menos invasivo y más eficaz.

Mirarse al espejo sin cansancio. La blefaroplastia, tradicional o láser, ha dejado de ser un simple capricho estético para convertirse en una parte fundamental del bienestar integral, ayudando a las personas a vivir mejor, no solo a verse mejor. Porque la mirada no solo refleja lo que sentimos… también lo que vemos.


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