Las series turcas, como Una nueva vida, han estado desde hace varios años conquistando las pantallas del mundo gracias a su forma de combinar la emoción, la intriga y el drama familiar. Una nueva vida, por su parte, se ha transformado en uno de esos fenómenos televisivos que deslumbran al espectador con giros y más giros argumentales, personajes intrincados y conflictos imposibles de resolver.
2INTRIGAS EN LA MANSIÓN KORHAN

Mientras Seyran y Ferit tenían su propia historia de drama en Una nueva vida, la familia Korhan mantenía su propia lucha interna. Preocupado por la posibilidad de que Halis revisara las cuentas de la empresa, Orhan quiso encontrar la solución más desesperada. El miedo a perderlo todo provocó que Orhan maquinara un plan horrible con Ifakat: privar a Halis de sus potestades y convertirse en sus tutores. Intentaban obtener el poder máximo sobre la fortuna familiar y también la influencia familiar.
La casa Korhan se convirtió en un tablero de ajedrez donde cualquier movimiento podía cambiar el futuro de todos los existentes. Los silencios, las miradas y las conversaciones casi susurradas mostraban un ambiente marcado por las sospechas y las traiciones. En esa casa se intuía que nadie podía fiarse del todo de nadie, y que incluso el más mínimo de los detalles podía ser utilizado como una armas.
Mientras tanto, Ferit intentaba retomar su relación con Seyran llevándola a una de sus casas, en un lugar que su pensamiento le decía que podían volver a encontrarse lejos de la presión de la casa. Sin embargo, aquel encuentro, que comenzó con un intento de reconciliación, concluyó con un estallido. Seyran, cansada de promesas sin cumplir, le reprochó su cobardía y deslealtad, y Ferit respondía con reproches igualmente dolorosos.
Esa soledad no le supuso cerrar su vida, sino todo lo contrario, fue la chispa de una decisión inesperada y muy clara. Seyran entendió que no podría soportar continuadamente en silencio las manipulaciones y abusos que habían marcado su vida; y esa determinación no sólo cambiaría su destino, sino el de todos los Korhan.