El debate sobre el consumo de pescado en Europa ha vuelto a acaparar los titulares, y la OCU busca respuestas entre la nube de opiniones generalizadas. La razón es la decisión de algunas ciudades de Francia de eliminar el atún en conserva de los menús escolares, alegando la presencia de mercurio en un alimento tan popular. Esta noticia ha generado incertidumbre entre los consumidores y las familias, que se plantean si dar atún a los niños puede llegar a ser una práctica peligrosa para la salud.
3EL PAPEL DEL ATÚN EN UNA DIETA SALUDABLE

La controversia francesa plantea una gran cuestión de fondo: ¿de qué manera deben las autoridades sanitarias proteger a los grupos de población más puedan descritos como más vulnerables sin dar la alarma al conjunto de la población? Por eso, AESAN ha dado ciertas recomendaciones de manera bastante clara que merece la pena recordar.
Para el colectivo formado por las mujeres gestantes, las mujeres en periodo de lactancia y los niños de corta edad, lo más adecuado es evitar los peces con un alto contenido de mercurio, es decir, las especies con alto contenido en mercurio, como por ejemplo, el pez espada, el tiburón, el lucio, o el atún rojo. En cuanto los niños de 10 a 14 años, se trata de no superar los 120 gramos al mes de estas especies. Estas no se aplicarían al atún enlatado como el que nos llega a España dado que proviene de especies con niveles bastante más bajos.
El mensaje fundamental que hay que transmitir es que no existe ningún alimento, por muy saludable que sea, que se deba ingesta únicamente. La variedad en la dieta es muy importante, y esto, lógicamente, se extiende al pescado. Alternar diferentes especies —de la sardina y caballa a la merluza o dorada— permitirá, una vez más, beneficiarse de sus propiedades sin acumular potenciales riesgos por contaminantes concretos.
En este sentido, el atún en lata nunca debe quedar fuera de juego. Es práctico, nutritivo, accesible, además de ser parte de la tradición cotidiana de un gran número de familias. Su consumo, moderado en vez de sistemático, no solo es seguro, sino que es recomendable como fuente de proteínas y omega-3. Hay que recordar que lo verdaderamente importante es que no se convierta en la única opción de pescado y que se respeten las orientaciones que existen respecto a la salud según las particularidades del grupo y la edad de las personas.