En los últimos años, estudiar informática o cualquiera de sus derivados fue casi un sinónimo de éxito asegurado. Gobiernos, empresas y universidades insistían en que aprender a programar abría la puerta a trabajos estables, sueldos altos y prestigio profesional. Sin embargo, ese horizonte dorado se ha visto empañado por la inteligencia artificial.
La irrupción de esta nueva herramienta ha cambiado las reglas del juego en el mercado laboral tecnológico. Lo que antes parecía una autopista de oportunidades se ha convertido en un camino con obstáculos, en el que muchos recién graduados se ven forzados a replantear sus expectativas y a buscar empleo en sectores alejados de aquello para lo que se formaron. En este artículo te explicaremos por que la inteligencia artificial representa un problema para los futuros profesionales de esta rama.
3Inteligencia artificial: la automatización como reemplazo

Hace apenas una década, los recién graduados encontraban su entrada natural en el mercado en puestos de nivel inicial, programando tareas básicas y aprendiendo sobre la marcha. Hoy, gran parte de esas funciones han sido absorbidas por sistemas de inteligencia artificial capaces de generar y depurar código en cuestión de segundos.
Empresas que antes necesitaban equipos completos de programadores júnior ahora priorizan la implementación de soluciones tecnológicas que hacen ese trabajo de forma más rápida y barata. Para los recién graduados, esto significa la desaparición de los escalones de entrada que les permitían ganar experiencia.
La consecuencia inmediata es un círculo vicioso: sin vacantes iniciales no hay posibilidad de aprendizaje práctico, y sin experiencia resulta casi imposible acceder a puestos de mayor responsabilidad.