En la sección Gossip de Merca2, nos llega una noticia que ha sacudido el panorama del corazón: Rocío Flores ha salido salpicada por la reciente ruptura de Olga Moreno y Agustín Etienne, una relación que llevaba consolidándose durante casi tres años. Fue en aquel momento cuando Olga y Agustín dejaron de ser simplemente representada y representante, o amigos, para pasar a ser algo más, encontrando en el otro un apoyo sentimental tras vivencias complicadas. El ex de Arantxa de Benito se convirtió en el hombre con el que Olga recuperó la ilusión en el amor después de su dolorosa ruptura con Antonio David Flores, un episodio complicado en el que Marta Riesco también tuvo un protagonismo mediático, y al que Agustín, de manera profesional, había representado.
1Esto es lo que ha hecho Rocío Flores

Aunque a lo largo de estos años se había especulado con crisis puntuales o fuertes discusiones entre la pareja, ahora parece que la separación es un hecho irrefutable. Así lo asegura Semana, que sitúa la ruptura a finales de junio, poco después de regresar de unas vacaciones que compartieron en Formentera, un viaje que parecía sellar la complicidad que ambos habían cultivado durante su noviazgo. La noticia ha sorprendido a muchos, pero no tanto a quienes han seguido de cerca la relación, marcada por altibajos y por la constante exposición mediática de sus protagonistas.
Entre las personas que han ofrecido un hombro a Olga durante estos difíciles momentos se encuentra Rocío Flores, quien ha mantenido una relación compleja con la expareja de su padre a lo largo de los años. La conexión entre ellas se ha reforzado en los últimos tiempos, especialmente tras su reciente encuentro en Málaga, donde habrían estrechado lazos. Este acercamiento se produjo tras una cita judicial de Rocío, en la que coincidió con su madre, Rocío Carrasco, después de trece años sin verse, lo que sin duda añade una capa de intensidad emocional a este momento en la vida de ambas mujeres.
La historia de amor entre Olga Moreno y Agustín Etienne sorprendió a todos, incluso a ellos mismos. Olga vivió uno de los momentos más duros de su vida cuando confirmó sus sospechas sobre la infidelidad de su exmarido con Marta Riesco, tras un matrimonio de veinte años en el que había defendido a su esposo ante todas las polémicas relacionadas con Rocío Carrasco, además de haber ayudado a criar a sus hijos como propios. Esta traición supuso un verdadero mazazo emocional para Olga, que buscó consuelo en quienes le rodeaban, y fue precisamente en este contexto que su relación con Agustín se intensificó.