Elon Musk ha decidido dar un nuevo golpe de timón para transformar la rentabilidad de X, la plataforma que heredó la sombra comercial de Twitter. Su nuevo objetivo es que Grok, el bot conversacional desarrollado por xAI, se convierta en un canal publicitario capaz de conectar soluciones con necesidades en tiempo real.
La propuesta no solo busca captar anunciantes, sino también “superar la maldición de Twitter”, como la definió el propio Elon Musk: una historia marcada por dificultades para segmentar audiencias y optimizar la inversión publicitaria. Ahora, la apuesta se centra en combinar la inteligencia artificial con un formato innovador, en el que la publicidad aparezca integrada en las respuestas personalizadas de Grok.
1Elon Musk anuncia que la publicidad llega al corazón de Grok

La estrategia que Elon Musk expuso en una conversación con planificadores publicitarios parte de una premisa sencilla pero ambiciosa: si un usuario busca resolver un problema, la respuesta del bot podrá incluir un anuncio de una solución específica. Esto abre la puerta a un nuevo tipo de publicidad contextual, en la que el impacto se mide no solo por la visibilidad, sino por la relevancia del momento en que se presenta.
Aunque el magnate no ofreció todos los detalles, se sabe que este modelo aprovechará la capacidad de segmentación de xAI, la matriz tecnológica que ahora lidera el desarrollo de X. La integración publicitaria dentro de Grok pretende ser más que un banner o un video: busca convertirse en parte natural de la conversación, sin romper la experiencia del usuario.
La idea no es nueva en el mundo digital, pero en X se presenta como una respuesta urgente a la caída del interés de los anunciantes desde la compra de la plataforma por Elon Musk en 2022. Con la salida de Linda Yaccarino, que había sido fichada para recuperar la inversión publicitaria, el propio Musk vuelve a tomar el timón en esta área.