Movistar Plus+ está decidida a mantener su hegemonía en el deporte televisado tras tras perder varios contenidos premium. La pérdida de los derechos de retransmisión de la Liga ACB, la NBA y la NFL ha encendido todas las alarmas entre algunos clientes de la operadora, cuyo negocio en España depende en gran medida de la fidelización de clientes premium, es decir, aquellos que están dispuestos a pagar más de 100 euros al mes por acceder a los partidos del Real Madrid, Fútbol Club Barcelona, Atlético de Madrid y el resto de equipos ligueros.
Durante años, Movistar fue la gran referencia del deporte en España, pero la irrupción de nuevos actores como Dazn, que ha arrebatado derechos muy vistosos como la Premier League, la Bundesliga y la Serie A italiana (Calcio), ha obligado a la compañía a replantear su estrategia.
Actualmente, la filial de Telefónica comparte los derechos de LaLiga EA Sports con Dazn para ahorrar. Sin embargo, el nuevo presidente de la operadora, Marc Murtra, quiere dar un giro de timón: recuperar el fútbol en exclusiva como ancla principal para mantener a su base de suscriptores de alto valor. Para lograr este objetivo, Movistar ya ha comenzado los movimientos.
Según avanza El Confidencial, Javier de Paz, presidente de Movistar, ha iniciado contactos con Javier Tebas, máximo dirigente de LaLiga, para manifestar el interés de la compañía en adquirir en exclusiva los derechos de LaLiga a partir de la temporada 2026-2027.
Telefónica también pretende retener los de la Champions League, cuyo contrato expira un año antes. La teleco quiere presentarse en solitario a la subasta que LaLiga planea lanzar en septiembre, aunque desde la patronal del fútbol español insisten en que la licitación será pública y abierta, en busca de la máxima transparencia y para garantizar una mayor recaudación, especialmente bajo el escrutinio del Real Madrid y su presidente Florentino Pérez, crítico habitual de la gestión de Tebas.
A pesar de que el actual reparto con Dazn fue considerado inicialmente un éxito financiero, Telefónica ha perdido una parte significativa de suscriptores premium en los últimos años. Actualmente cuenta con 3,6 millones de clientes, lejos de los cuatro millones que llegó a tener. De esos, 600.000 corresponden a su nueva OTT low-cost.
La situación ha empeorado tras la pérdida de los derechos de la Liga ACB, que tras una década en manos de Movistar, pasa a manos de Dazn y podría contar con un partido semanal al canal Teledeporte, de Radio Televisión Española.
A este golpe se sumó la marcha parcial de la NBA a Amazon Prime, que desde otoño tendrá una parte destacada de la mejor liga de baloncesto del mundo. Movistar quizá pueda mantener algunos encuentros y parte de los playoff. Y la NFL, con especial valor por la Superbowl, también ha desaparecido de su catálogo.
En contraposición, Movistar aún conserva activos importantes como la Euroliga de baloncesto, los grandes torneos de tenis, y el torneo Seis Naciones de rugby. Pero, sin duda, el gran objetivo sigue siendo el fútbol nacional e internacional. De ahí su renovada apuesta por LaLiga, incluso con la intención de volver a encargarse directamente de la producción de los partidos, como hacía antes de 2019.
El Confidencial Digital avanza que la compañía está valorando la ruptura con el modelo de producción centralizada impuesto por LaLiga, lo que devolvería a Movistar un rol protagonista como realizador principal de los encuentros.
LA CATEGORÍA DE BRONCE, EN MOVISTAR PLUS+
Además, Movistar Plus+ ha reforzado su presencia en el fútbol nacional con la incorporación de la Primera Federación, que ofrecerá desde la temporada 2025/26 diez partidos por jornada en su paquete básico. Esta categoría, con clubes históricos, aficiones entregadas y jóvenes talentos, busca posicionarse como una alternativa atractiva dentro del catálogo de la operadora.

Este movimiento también responde a la necesidad de ofrecer contenido exclusivo a bajo coste, especialmente tras el lanzamiento de su promoción de 4,99 euros por tres meses para nuevos suscriptores de su OTT. Por su parte, la deficitaria Dazn continúa ampliando su cartera de derechos deportivos y consolidando su posición como el ‘Netflix del deporte‘.
La plataforma se ha hecho con la mayoría de las competiciones que han salido a subasta en los últimos años, y no se descarta que también puje con fuerza en la próxima licitación de LaLiga.