El ejercicio Superman se ha convertido, casi de la noche a la mañana, en el secreto mejor guardado de los gimnasios y el arma definitiva de quienes buscan un cambio real en su figura sin necesidad de machacarse con infinitas series de abdominales. Lo que resulta fascinante es que la clave para conseguir un vientre plano no está en los abdominales tradicionales, sino en un movimiento que imita al héroe volando, un gesto sencillo que esconde un poder transformador para todo tu cuerpo. ¿Un ejercicio que trabaja la espalda para definir el abdomen? Sigue leyendo, porque la respuesta te va a sorprender y cambiará tu forma de entrenar para siempre.
La promesa de un abdomen perfecto en poco tiempo suena casi a milagro, pero detrás de este movimiento hay una lógica aplastante que la ciencia del deporte respalda por completo. Olvídate de todo lo que creías saber sobre el entrenamiento de la zona media, porque su eficacia reside en fortalecer toda la cadena posterior del cuerpo, un pilar fundamental para la estabilidad y la apariencia de un abdomen tonificado. Este enfoque, que muchos entrenadores personales ya aplican, es la razón por la que podrías haber estado perdiendo el tiempo con los ejercicios equivocados. Prepárate para descubrir cómo un solo gesto puede hacer más por ti que cientos de crunches.
2EL SECRETO NO ESTÁ EN EL ABDOMEN, SINO DETRÁS

Aquí viene la gran revelación, la pieza que desmonta el puzle y que explica por qué el ejercicio Superman es tan revolucionario para conseguir la anhelada tableta de chocolate. El abdomen no es una entidad aislada; forma parte de un sistema complejo llamado «core» o núcleo. La verdad es que un abdomen solo puede verse plano y fuerte si la espalda que lo sostiene, su contraparte, está igual de trabajada. Una espalda baja débil provoca que la pelvis se incline hacia adelante, haciendo que el abdomen se proyecte hacia fuera, por mucho que lo entrenes directamente.
Por tanto, al realizar la postura del hombre de acero, no estás dejando de lado tus abdominales, sino que los estás abordando desde un ángulo mucho más inteligente y eficaz. Estás construyendo los cimientos. Piensa en tu cuerpo como un edificio: de nada sirve tener una fachada espectacular si la estructura trasera está a punto de derrumbarse. El ejercicio Superman se encarga precisamente de eso, ya que fortalecer el core en su conjunto, especialmente la zona lumbar, mejora la postura y crea un efecto de «corsé natural» que aplana el vientre. Es la diferencia entre decorar la superficie y construir una base sólida.