miércoles, 6 agosto 2025

La configuración de Google que está vendiendo tu ubicación sin que lo sepas

La configuración de Google que muchos usuarios desconocen está recopilando y, en la práctica, monetizando su ubicación precisa, incluso cuando creen haber tomado las precauciones necesarias para evitarlo. El gesto casi automático de desactivar el icono de ubicación o GPS en nuestro teléfono móvil nos proporciona una falsa sensación de seguridad, una tranquilidad digital que el gigante tecnológico se encarga de sortear mediante un entramado de permisos y ajustes deliberadamente confusos. Lo que sucede en las bambalinas de nuestra cuenta es un rastreo constante y silencioso, un mapa detallado de nuestra vida que se construye sin un consentimiento explícito y transparente.

Publicidad

Este seguimiento va mucho más allá de una simple chincheta en un mapa. Registra los lugares que visitamos, el tiempo que pasamos en ellos, las rutas que tomamos para llegar e incluso las paradas que hacemos por el camino. Esta información, de un valor incalculable para el marketing y la publicidad, se convierte en la materia prima de un negocio multimillonario. El problema es que el control sobre este flujo de datos personales está oculto, no en el interruptor principal de ubicación, sino en un submenú de nuestra cuenta de Google, un rincón digital al que la mayoría de los usuarios nunca accede y cuya existencia ni siquiera sospecha.

4
RECUPERA EL CONTROL: LA RUTA PARA BORRAR TU RASTRO EN GOOGLE

Fuente Pexels

Afortunadamente, es posible cerrar este grifo de información, aunque el camino no sea del todo intuitivo. El primer paso es acceder a la gestión de tu cuenta de Google, algo que puedes hacer desde cualquier navegador buscando «Mi cuenta de Google«. Una vez dentro, hay que dirigirse a la sección «Datos y privacidad». Aquí es donde encontraremos los dos interruptores clave. El primero es el conocido «Historial de Ubicaciones», que debemos asegurarnos de que esté en «Pausado». El segundo, y más importante, es «Actividad web y de aplicaciones», el ajuste que debemos desactivar para detener el grueso de la recopilación.

Pero pausar la recopilación no borra el pasado. Dentro de la misma sección de «Actividad web y de aplicaciones», existe una opción para «Gestionar toda la actividad». Al entrar, se nos presentará un historial detallado de nuestra vida digital. Aquí podemos y debemos eliminar la actividad anterior, ya sea de forma manual o, más recomendable aún, configurando una eliminación automática para que Google borre los datos cada 3, 18 o 36 meses. Es fundamental activar esta opción, la única forma de asegurarse de que nuestro rastro digital no se almacene indefinidamente en los servidores de la compañía.


Publicidad