Lo que comenzó como una mañana televisiva más en Vamos a ver se convirtió en uno de los momentos más comentados del día por culpa de la última portada protagonizada por Terelu Campos, que ha hecho estallar las redes sociales y desatar un encendido debate en el programa de Telecinco.
2Joaquín Prat defiende a Terelu Campos

En el plató de Vamos a ver, como era de esperar, se ha abordado esta aparición pública de Terelu con distintos puntos de vista. Carmen Borrego ha salido en defensa de su hermana, reivindicando el derecho de cualquier mujer, y especialmente de una mujer que ha superado dos cánceres, a mostrarse en traje de baño si así lo desea. La colaboradora ha recordado que ella misma ha protagonizado posados similares en el pasado y ha expresado su admiración por la valentía de Terelu. Además, ha puesto en valor que utilice este tipo de publicaciones para hablar sin tapujos sobre cómo la enfermedad ha afectado no solo a su cuerpo, sino también a su autoestima y a su manera de relacionarse con los hombres. Un gesto que, más allá del espectáculo, ella considera un ejercicio de normalización necesario.
En medio del debate, Alessandro Lequio ha lanzado una frase que ha levantado sonrisas en el plató, incluso por parte de Carmen Borrego: “Sois las Kardashian del Mediterráneo”. Un comentario que, lejos de incomodar, ha provocado que ambos protagonistas de uno de los enfrentamientos más sonados de los últimos tiempos en televisión se fundieran en un cálido abrazo. La escena ha sorprendido a la audiencia y ha sido uno de los momentos más comentados de la jornada. Lequio, con su habitual ironía, ha conseguido distender por unos minutos el ambiente, aunque la calma ha durado poco.
El problema ha llegado cuando el programa ha mostrado, para ilustrar el debate, una portada de Mar Flores en bañador. La madre de Carlo Costanzia fue fotografiada hace unas semanas en la playa, también en bikini, por otra publicación. A partir de ahí, en el plató se han comenzado a hacer comparaciones entre las imágenes de Terelu y las de Mar, lo que ha generado una creciente incomodidad tanto entre los colaboradores como en los espectadores. Mientras algunos opinaban sobre cuál de las dos estaba “mejor” o tenía “más presencia”, la conversación empezó a tomar un cariz que a Joaquín Prat no le gustó nada. Visiblemente molesto, el presentador pidió de inmediato que retiraran las imágenes de las pantallas: “Esto es feucho. No me gustan las comparativas. Quitad las portadas, es feucho”, repitió de forma tajante, mostrando su incomodidad con el rumbo que había tomado la conversación.
La situación marcó un antes y un después en la emisión de ese día. Joaquín Prat, siempre firme en su voluntad de no fomentar juicios sobre el físico de nadie, no quiso contribuir al circo mediático en el que parecía que se estaba convirtiendo el espacio. Su intervención no solo detuvo en seco el debate, sino que dejó claro que no todo vale en televisión, especialmente cuando se trata de comparar cuerpos o generar controversias gratuitas entre mujeres. Carmen Borrego también se posicionó al respecto, aunque con algo más de diplomacia: “Nosotras no vivimos de nuestro cuerpo, ya lo he dicho muchas veces”, recordó, intentando quitar hierro al asunto sin dejar de señalar el tipo de comentarios que se estaban generando.