Merlin Properties ha presentado unos resultados positivos en el primer semestre de 2025, con un beneficio operativo de 166,6 millones de euros, lo que representa un aumento del 12,8% respecto al mismo periodo del año anterior. Además, la compañía ha experimentado un crecimiento del 9% en su Ebitda, alcanzando los 205,3 millones de euros.
Estas cifras evidencian un rendimiento favorable en un contexto de incertidumbre económica, lo que destaca la capacidad de la compañía para adaptarse y gestionar sus activos. Sin embargo, un análisis más profundo revela que estos resultados están impulsados en parte por la valorización de sus activos, un aspecto que, aunque positivo, plantea ciertos interrogantes sobre la sostenibilidad del crecimiento a largo plazo.
A pesar de que la valoración total de su cartera ha subido un 3,2%, el crecimiento ha estado muy vinculado a la revalorización de ciertos activos, sobre todo en los centros de datos, cuyo valor aumentó un 38,2%.
Esta revalorización ha sido un factor crucial para los resultados financieros de la compañía. No obstante, esta valorización no siempre se traduce en ingresos estables y recurrentes, lo que puede ser un indicio de que el crecimiento de la empresa depende en gran medida de factores no operativos.
OCUPACIÓN DE ACTIVOS
En términos de rentabilidad, la ocupación de los activos sigue siendo alta, alcanzando el 95,4%. Este es un dato positivo que refleja la estabilidad de la empresa en un mercado con alta demanda. Sin embargo, el crecimiento de las rentas comparables ha sido moderado. En el segmento de oficinas, las rentas aumentaron un 3,9%, mientras que en logística la subida fue del 2,2%.

El sector de los centros comerciales, aunque con un crecimiento en las rentas del 3,2%, sigue viendo cómo el comercio electrónico y los cambios en los hábitos de consumo podrían afectar su desempeño en el futuro. Este crecimiento, aunque positivo, refleja las dificultades estructurales que enfrenta el sector en un contexto de creciente digitalización y cambio en las preferencias de los consumidores.
Los centros comerciales siguen siendo un activo valioso para Merlin, pero la evolución de este segmento será clave para determinar la sostenibilidad de su modelo de negocio a largo plazo. En cuanto a la estrategia de inversión, Merlin se ha centrado en la compra de activos selectivos, como el espacio LOOM Salamanca, y ha continuado expandiendo su banco de suelo para centros de datos.
Este enfoque prudente refleja un entorno más incierto, en el que las oportunidades de inversión de alto rendimiento son menos abundantes que en años anteriores. A medida que el mercado inmobiliario se va saturando en ciertos segmentos, las adquisiciones se han vuelto más estratégicas y menos centradas en la expansión agresiva.
En cuanto a la deuda, Merlin mantiene un nivel relativamente bajo, con un endeudamiento del 28,6% sobre el valor de sus activos, lo que le permite mantener una posición financiera sólida. Además, la compañía tiene una posición de liquidez cómoda, con 1.649 millones de euros disponibles para afrontar cualquier eventualidad. La deuda está completamente a tipo fijo, lo que proporciona una mayor estabilidad en un contexto de incertidumbre económica y fluctuaciones en las tasas de interés.
Esta estructura financiera permite a Merlin protegerse de posibles aumentos en los costos de financiación, pero la dependencia del sector inmobiliario como fuente principal de valor siempre conlleva ciertos riesgos, especialmente si el mercado experimenta una desaceleración más pronunciada.
RETOS
Merlin Properties ha logrado mantener un crecimiento positivo en el primer semestre de 2025, impulsado por la valorización de activos, una ocupación sólida y un aumento moderado de las rentas. Sin embargo, la empresa enfrenta varios desafíos a largo plazo, como la desaceleración de los precios de renovación de oficinas y el impacto del comercio electrónico en los centros comerciales.
Si bien la compañía ha adoptado un enfoque prudente en sus inversiones y mantiene una posición financiera sólida, depender de la valorización de activos para sostener el crecimiento podría no ser una estrategia a largo plazo viable.