Los viernes por la noche, entre las 20.00 y las 21.00 horas, es el momento preferido de los ladrones para entrar en los hogares, tal y como se desprende del último informe publicado por el Observatorio Securitas Direct, que analiza los saltos de alarma reales y las intrusiones atendidas por su Central Receptora de Alarmas (CRA). El observatorio está impulsado por Securitas Direct, compañía líder en protección de hogares, negocios y pequeñas empresas, parte de Verisure con presencia en 17 países.
En líneas generales, el estudio señala que las intrusiones en residencias ocurren todos los días de la semana durante las últimas horas del día (de 20.00 a 23.00 horas), con una especial incidencia en los fines de semana y festivos, concentrándose los robos o intentos de robo en viernes.
Este patrón horario responde a que los ladrones aprovechan los momentos con menor visibilidad en las calles y en la que hay una mayor probabilidad de que los ocupantes de las viviendas estén dormidos o fuera de casa para actuar. También debido a la mayor probabilidad de que las casas estén vacías, existe un 16% más de probabilidades de que los robos se den en día festivo que en laborable.
En este punto, cabe señalar que los lunes destacan como uno de los días con menor incidencia de intrusiones registradas, según recoge el Observatorio Securitas Direct “La Seguridad en Hogares y Negocios”.
En cuanto al tipo de hogar, se detecta un mayor nivel de intrusión en los chalés, villas y adosados. En concreto, existe el doble de riesgo de sufrir un robo o intento de robo en esta tipología de vivienda que en los pisos o apartamentos porque
disponen de más puntos débiles, como ventanas, patios, puerta de garaje o traseras. Aun así, se está registrando un incremento de los intentos de intrusión en pisos.

El estudio de Securitas Direct ha detectado un cambio significativo en el tipo de vía donde se concentran las intrusiones, que han pasado de predominar en zonas urbanas a desplazarse a vías más aisladas, como carreteras, polígonos industriales y fincas.
Este incremento responde a un aumento de la implementación de medidas de seguridad en entornos urbanos (plazas, avenidas, pasajes…) lo que reduce la vulnerabilidad de estos espacios. Además, las vías más alejadas suelen presentar condiciones que favorecen las intrusiones: menor vigilancia, escasa presencia de vecinos o transeúntes y rutas de escape más accesibles para los intrusos
De madrugada y en bares, cuándo y dónde más actúan
En cuanto a los negocios, el patrón horario de los ladrones cambia sensiblemente. El número de intrusiones se concentra en las madrugadas, entre la 01.00 y las 04.00 horas am, de todos los días de la semana, registrándose una mayor incidencia los miércoles entre las 02.00 y las 03.00 horas am. Así, los ladrones optan por horas del día en los que hay oscuridad en las calles y menos movimiento de personas y en los que los negocios se encuentran cerrados y sin personal.
En este punto, el Observatorio señala que hay casi cuatro veces más de probabilidades de sufrir robos o intentos de robos en los negocios que en las residencias, siendo los bares y restaurantes los objetivos preminentes. En concreto, los bares, pubs y restaurantes son casi el doble de propensos a registrar una intrusión que las oficinas o las naves.

Tecnología y personas
El Observatorio también refleja un creciente interés por la protección y la seguridad por lo que ya el 85,3% de los españoles (+1,5 p.p.) reconoce que protege sus hogares y negocios durante todo el año con algún sistema de seguridad, un área en el que está ganando peso es uso de nuevas tecnologías y la digitalización.
Así, las alarmas conectadas a un Central Receptora de Alarmas (CRA) siguen creciendo como medida de seguridad (+2,4 p.p.) respecto a años anteriores y ya un 22,7% de los hogares y negocios afirman contar con una. Por su parte, el uso de puertas de seguridad, cerraduras antibumping y rejas muestran una tendencia a la baja, mientras que las cerraduras inteligentes, las cámaras de vídeo y los telefonillos con cámara crecen (gráfico3).
Aún así, las personas siguen confiando más en otras personas para proteger lo que más les importa, priorizando que se combine el uso de la tecnología con un equipo de profesionales. Así, el 54% sólo confía en la inteligencia artificial si cuenta con supervisión humana, y solo el 12% confiaría en robots para proteger su hogar.
