Este viernes, 25 de julio, el episodio 641 de La Promesa, la fervorosamente seguida serie de época, tiene un cierto aire de tormenta acumulada, la de un campo de batalla. Viejas heridas son reabiertas, nuevos pactos son formados, la tensión hierve a fuego lento. Y sobresale entre todo ello la pregunta de si estamos siendo los testigos de los últimos días de Curro en el palacio, el joven que está atrapado entre el deber, la lealtad y la rabia, y que parece entregarse a un destino incierto y a la vez irreversible.
3CURRO, AL LÍMITE EN LA PROMESA

Pero si hay una persona que se encuentra en una situación que presenta un punto de inflexión pues su estado de cosas está atravesando un mal momento, ese es precisamente Curro. Durante los últimos episodios, su conducta se ha vuelto cada vez más convulsa, llevada por eventos de frustración, terror y valor. «Curro observa con maestría la empecinada de Ángela porque hurgue en los papeles de Lorenzo,» sabiéndose que jugar con fuego puede tener consecuencias incalculables.
El capitán de la Mata no es un enemigo que se pueda tener en cuenta. Su trayectoria está manchada con asesinos secretos y represalias implacables. Curro, que sabe el peligro que lleva consigo, se mueve alternativamente entre el ímpetu por parar a Ángela y la actitud de descubrir al capitán. «La tensión va a determinar una ocasión culminante en el momento en que Curro, cansado de la provocativa de Lorenzo, se lanza sobre él con tanta violencia…» que la mansión podría haber temblado.
El conflicto, oculto durante un largo periodo, irrumpe en tal escena en la que lo dramático y lo decisivo prometen convertirse en lo mismo. La reacción de Lorenzo, ni que decir tiene, no se hace esperar: podría llegar a pedir que Curro sea expulsado del palacio. “¿Pedirán que lo echen de La Promesa?” La pregunta es sobrevolada como una amenaza, no solo hacia Curro, sino también en el sentido de que quienes lo quieren, lo aprecian, lo cuidan verían en su expulsión una pérdida irreparable.
Sin embargo, entre el bullicio, hay una idea clara: haced todo aquello que unis el modo en que se logra la familia. “Con cada pequeño triunfo y cada nueva acometida, la familia y el servicio se fortifican, demostrando así que, más allá de los rangos y de las intrigas, en La Promesa persiste una conexión intensa, casi familiar, que les sostiene frente a las adversidades.