Las noticias recientes sugerían que la DGT planeaba imponer revisiones médicas más duras y renovar el permiso a una edad límite. Sin embargo, Tráfico ha negado rotundamente cualquier modificación: no hay ni edad de jubilación del carnet ni un endurecimiento específico para quienes superan los sesenta y cinco. La clave es el estado de las capacidades y no el año de nacimiento.
Cada permiso de conducir sigue un calendario fijo de vigencia, y la renovación depende de superar las pruebas médicas estándar. La DGT subraya que no existe ninguna reforma que cambie los plazos actuales para mayores de sesenta y cinco años, más allá de aplicar los criterios de salud previstos para todos los conductores.
4Reconocimientos médicos uniformes

La revisión que deben pasar todos los conductores, sin excepción de edad, contempla pruebas de audición, vista, reflejos y evaluación general de salud. La DGT recalca que ese proceso es idéntico para mayores de sesenta y cinco y para cualquiera que renueve antes de esa edad.
La salud y las capacidades físicas son el único filtro para continuar al volante. Solo si durante el reconocimiento se detecta alguna deficiencia significativa se acorta el periodo de vigencia, sin que esto tenga nada que ver con la cifra de años cumplidos.