La startup especializada en robótica autónoma Umibots ha conseguido que la UTE de FCC Medio Ambiente y Ingesan OHLA de Santander incorpore por primera vez robots 100% autónomos e inteligentes para optimizar la limpieza de playas de residuos tóxicos, gracias a los robots UmiBeach, capaces de retirar hasta 25 kilos de todo tipo de residuos y basuras de las playas españolas. La iniciativa comienza a desplegarse este mes de julio en la playa del Sardinero de Santander y aspira a ser la solución para mantener impecables las más de 3.500 playas españolas. La iniciativa se suma a otras relacionadas con la tecnología y la digitalización de nuestras playas que proporcionan calidad, seguridad y comodidad en nuestro valioso litoral español.
Junto a FCC Medio Ambiente e Ingesan OHLA, el sector de mantenimiento de playas se encuentra prácticamente en manos de otras cuatro grandes compañías; ACCIONA, Urbaser, Prezero y Eulen, y cuenta ya con más de 3.000 millones al año invertidos en el mantenimiento de las playas españolas, inversión que realizan los ayuntamientos costeros y de la que el 50% de ese presupuesto se va a invertir en tecnología.
El coste de estos sofisticados robots es de 50.000 euros por unidad, así que con solo el 10% de los 1.500 millones de euros previstos para la inversión tecnológica «beach» en general, «esta iniciativa iniciada en Cantabria se podría poner en marcha en todo el territorio nacional«, según sostienen desde las empresas involucradas en la iniciativa. Con ello, además, España, que ya es pionera en implantar estos ‘UmiBeach, «únicos en el mercado, se podría convertir en el motor de la eco-playa al incorporar esta tecnología en el 70% de sus costas», aseguran.
España, que ya es pionera en implantar estos ‘UmiBeach, «únicos en el mercado, se podría convertir en el motor de la eco-playa al incorporar esta tecnología en el 70% de sus costas»
Los robot en cuestión, «únicos en el mundo», a pesar de su pequeño tamaño, son capaces de retirar hasta 25 kilos de colillas, plásticos y otros residuos tóxicos y lo hacen mientras cohabitan sin molestar con los bañistas, «respetando desde toallas, hamacas a personas y detectando incluso los cambios en las mareas». Según la empresa responsable de su creación y fabricación, son máquinas «inteligentes, seguras y altamente sostenibles y garantizan cero emisiones en zonas de especial sensibilidad ambiental como son las playas».
Su concepto es «altamente disruptivo», porque ha sido diseñado para alimentarse de cargas de energía solar, ofrece garantías en cuanto a eficacia y seguridad y, además, integra IA avanzada para la detección de personas y obstáculos mediante un triple sistema de seguridad, basado en visión artificial que permite recalcular trayectorias, esquiva obstáculos, personas y desniveles, o bien se detine si es necesario.
Según Clodo González, fundador y CEO de Umibots «se trata de robots extraordinariamente seguros y eficaces, cuyo prototipo dotado de alta ingeniería ha sido testado con excelentes resultados en la playa de La Malvarrosa de Valencia durante seis meses». En su opinión, con el uso de esta tecnología «se podrían eliminar, durante la época estival, hasta el 100% de los residuos tóxicos más contaminantes de las playas españolas».

FCC y OHLA APUESTAN POR EL ‘UMIBEACH’
Estos UmiBeach que van a comenzar su tarea en Santander han sido adquiridos como apoyo a las labores tradicionales de limpieza que ya se realizan a través de la superUTE (Unión Temporal de Empresas) formada por ambas compañías, FCC Medio Ambiente e Ingesan OHLA, que están encargadas de la limpieza integral y mantenimiento de las 13 playas y arenales de la zona cántabra, con un importe global de 6,8 millones de euros y durante un periodo de cuatro años.
La novedad tecnológica de limpieza playera comenzará a operar el próximo viernes 25 de julio en la emblemática playa santanderina de El Sardinero, junto con 7 playas más de la ciudad y su zona, con lo que el Ayuntamiento de Santander se va a convertir en «pionero en materia de I+D+i de toda la costa española».
UmiBeach ha sido diseñado por un equipo de físicos, ingenieros de robótica y electrónica industrial que ha innovado con soluciones que no existían en el mercado. Su concepto está específicamente pensado para la superficie de la arena a través de un sofisticado sistema avanzado de cribado de arena y autodescarga, y puede ser configurado en función de la hora, las condiciones climatológicas o la saturación de la playa.
Está dotado de navegación por satélite que le permite crear un mapeo del entorno, por lo que toma decisiones «mientras detecta personas y obstáculos como toallas en el suelos o la línea del mar con total facilidad». A través de sus cámaras de visión artificial, junto con alarmas visuales y acústicas, se garantiza la seguridad tanto de día como de noche, gracias también a que dispone de conexión 5G capaz de avisar en caso de hurto mediante geolocalización.
Trabaja con una velocidad máxima de 2 metros por segundo y es capaz de trabajar 24 horas de forma ininterrumpida al día en condiciones climatológicas adversas y sin la supervisión humana. Igualmente, es capaz de trabajar en tiempo récord al alcanzar una velocidad de 6,5 Km a la hora, y puede acceder a zonas que sería imposible tratar utilizando cualquier otro tipo de tecnología más pesada.

OTRAS TECNOLOGÍAS ‘BEACH’
Los Umibeach se suman ya a una serie de diseños y desarrollos tecnológicos que ya consiguen hacer de la experiencia playera más cómoda y segura gracias a la tecnología. Gracias a distintos desarrollos, la tecnología ya ha transformado la manera en que se disfruta del tiempo junto al mar y nos permite conocer en tiempo real la calidad del agua, las condiciones del baño reflejadas en el color de la bandera, el grado de ocupación de la playa o la presencia de medusas, o en otros ámbitos relacionados con la seguridad.
Para tomar mediciones transmitir datos y anañizarlos, en nuestras costas se han introducido sistemas avanzados de monitorización, drones de vigilancia, boyas inteligentes, wereables de localización de niños o aplicaciones móviles que permiten una respuesta más rápida en situaciones de emergencia, pero también la prevención del ahogamiento y la mejora de los servicios de socorrismo.
Las playas también han comenzado a implementar estaciones de recarga solar y puntos Wi-Fi, y destaca también la aplicación de tecnología, en concreto y mayoritariamente IoT y analítica avanzada, con la que se puede digitalizar el baño, medir parámetros medioambientales y de calidad del agua de baño, así como la gestión y limpieza más adecuada del espacio junto al mar, como la que ofrecen los robot de la startup Unibots, o incluso controlar el aforo (mediante el uso de cámaras con algoritmos de visión artificial, por ejemplo).
Así, al menos en nuestro país ya se ha gestado el concepto de «Playa inteligente», que es capaz de condensar flujos de información procedentes de los usuarios y protagonistas de la experiencia turística. La combinación de las tecnologías de medición, como la sensórica, la conectividad y la analítica, en cuanto permiten generar conocimiento a partir del dato, se pueden aplicar para optimizar la seguridad y el bienestar en las playas españolas. Ese volumen de información se puede utilizar por agentes gestores económicos del litoral, y beneficiar también al marketing del turismo.