La Promesa se ha transformado en un hervidero de sentimientos, donde desesperanza y curiosidad se tornan en la sombra de un poder que no permite fallos, estela de la urgencia de solucionar la salud de Rafaela, que agoniza de muerte y sumerge a la familia en un abismo de desesperanza. En este capítulo, las decisiones extremas asentarán los destinos de todos ellos: desde Enora, quien de pronta a romper una cadena de pactos ancestrales, hasta Lope, quien ha hecho su descubrimiento, el cual decide que cambiará el rumbo de la investigación más oscura del palacio.
2SECRETOS Y TRAICIONES EN LA PROMESA

Ricardo pensó en un momento que había cambiado su hijo Santos en La Promesa. La emoción inicial de tenerlo al lado desaparece cuando se da cuenta de que su hijo había regresado a sus intrigas. ¿Qué cosas se le han pasado por la cabeza en su oportunidad? La decepción que se percibe en los ojos de Ricardo va de la mano con el peligro que pueda representar Santos.
En tanto, Lope—siempre sagaz—perseguía los pasos de un secreto escondido en casa de los duques de Carril, pues algún descubrimiento podría ser la solución al envenenamiento de Jana y tal vez la tormenta de peores consecuencias iba a llegar. Santos, por otro lado, en vez de lamentarse, quería disfrutar con el estupefaciente que podía desatar a su alrededor. Sus ir y venir a altas horas de la noche no pasan desapercibidas para Curro.
Cristóbal, avisado por sus chivatos, advierte la amenaza antes que nadie. Su mirada se raspa en Lope con renovada acritud, y no es muy complicado adivinar qué es lo que ha fraguado. Pero el mayordomo olvida un detalle: Enora, desde su escondite mudo, ha visto mucho. En esta partida de ajedrez donde las piezas se mueven solas, cualquier jugador puede ser víctima del evento.