A partir de enero de 2026, los triángulos de emergencia quedarán relegados y cada coche deberá llevar instalada una luz V-16 para señalizar averías. La DGT defiende que así los conductores estarán protegidos dentro del vehículo, sin exponerse al peligro de colocar un triángulo en mitad de la carretera. Sin embargo, ha surgido una inquietud real.
Que esas luces, diseñadas para destacar incluso bajo un sol intenso, puedan no verse bien a plena luz del día o resultar molestas para la vista de quien las observe de cerca pone en entredicho su eficacia. Este dilema desafía la premisa de mejorar la seguridad sin generar nuevos riesgos. Te contamos todas las novedades al respecto y cómo se puede resolver este problema tan importante.
8Plazos y consultas públicas

Aunque la fecha límite de obligatoriedad es enero de 2026, la normativa todavía acepta aportaciones de asociaciones de automovilistas y expertos en seguridad vial hasta finales de 2025. La DGT evaluará propuestas sobre brillo, conectividad y salud ocular antes de publicar el reglamento definitivo.
Es probable que se ajusten los límites de intensidad y se clarifiquen los requisitos técnicos con base en los ensayos en campo. La versión final deberá equilibrar seguridad y salud visual sin dejar cabos sueltos.