A partir de enero de 2026, los triángulos de emergencia quedarán relegados y cada coche deberá llevar instalada una luz V-16 para señalizar averías. La DGT defiende que así los conductores estarán protegidos dentro del vehículo, sin exponerse al peligro de colocar un triángulo en mitad de la carretera. Sin embargo, ha surgido una inquietud real.
Que esas luces, diseñadas para destacar incluso bajo un sol intenso, puedan no verse bien a plena luz del día o resultar molestas para la vista de quien las observe de cerca pone en entredicho su eficacia. Este dilema desafía la premisa de mejorar la seguridad sin generar nuevos riesgos. Te contamos todas las novedades al respecto y cómo se puede resolver este problema tan importante.
5Adaptación de la normativa europea

La legislación de la Unión Europea respalda el uso de señales luminosas portátiles, pero deja flexibilidad sobre potencia y diseño. La DGT ha definido criterios propios de brillo y conectividad adaptados a las carreteras españolas.
Sin embargo, esa adaptación aún se debate. Mientras algunos países optan por modelos muy potentes, aquí se estudia un límite medio que ofrezca buena visibilidad diurna sin generar deslumbramientos. El resultado final deberá reflejar el consenso técnico y social.