Hay que cenar, pero más temprano, eso es lo que indican los expertos. Durante el verano, es muy común que los horarios de las comidas se desajusten. Las vacaciones, las cenas tardías en terrazas o ese helado nocturno de paseo son parte de la experiencia estival. Sin embargo, la ciencia lo deja claro: cenar tarde puede estar saboteando tu salud y tu metabolismo, y es probable que no te estés dando cuenta.
¿Sabías que cenar después de las 21:00 puede ralentizar la quema de calorías y aumentar tu apetito al día siguiente? Así es. Según recientes estudios, la hora a la que cenas influye directamente en cómo tu cuerpo procesa la comida, cómo almacena la grasa e incluso en el control de tus antojos. Si estás buscando sentirte mejor, evitar subir de peso este verano o simplemente descansar mejor por las noches, cambiar la hora de tu cena puede ser más importante de lo que crees.
3¿Cuál es la hora ideal para cenar?

Aunque varía según la rutina de cada persona, la recomendación general es cenar entre las 18:30 y las 20:00 horas. De esta forma, dejas pasar al menos 2 o 3 horas antes de irte a dormir, lo que permite que el cuerpo digiera con calma y se prepare para descansar.
En países como España, donde las costumbres tienden a empujar la cena más allá de las 21:00, este hábito puede parecer difícil de cambiar, sobre todo en verano. Pero con algunos ajustes, es posible lograrlo sin renunciar a la vida social.